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Verdeliss toma una drástica decisión en su carrera de influencer. La vida de la exconcursante de 'Gran Hermano VIP' ha dado un giro de 180º en el último año que también se ha visto reflejado en sus redes sociales. "Desbordada" por la situación que ha estado viviendo en los últimos tiempos, ha decidido recurrir y pedir ayuda profesional.
"Vivo en deprivación de sueño, cansada, agotada, superada. Tengo ocho hijos, casa, trabajo (no solo de influencer)...", decía hace un par de meses mientras se desahogaba y reflexionaba sobre las dificultades que estaba encontrando a la hora conciliar y compaginar todas los ámbitos de su vida.
La de Pamplona, que recientemente conseguía proclamarse campeona de España de 100 km, ha estado, desde sus inicios como creadora de contenido, gestionando ella sola sus redes sociales. Con el paso de los años y conforme sus seguidores (y su familia) fueron aumentando, también lo hicieron sus colaboraciones, contratos y compromisos con marcas. Llegado un momento dado, su marido, Aritz Seminario, pasó a echarle una mano.
Pero Estefanía Unzú, que de un tiempo a esta parte ha dejado de compartir tanto contenido familiar para centrarse más en su faceta deportiva, se ha visto obligada a delegar la gestión de sus redes en una agencia externa especializada en influencers. "Generar contenidos era una mínima parte en comparación con todo el trabajo de oficina: videollamadas, reuniones, briefs, negociaciones, analíticas, mails acumulados hasta el infinito…y un sin fin de rituales que anteceden a una colaboración", cuenta a sus seguidores mientras justifica esta decisión que ha tenido que tomar.
"Estoy con una agencia. Desde 2018 he trabajado sola la gestión de mis RRSS…siempre con la premisa de “tienes que delegar”. Aritz pasó a llevar los contratos/facturas, pero a rachas me veía muy desbordada".
"No está mal admitir que no puedes con todo y dejarte ayudar", reconoce mientras asegura que, aunque no sabe si "quizás me arrepienta por haber dado este paso", se siente "definitivamente orgullosa" de sí misma simplemente por la idea de haberse dejado ayudar.
La madre de Aimar, Irati, Laia, Julen, las mellizas Eider y Anne, Miren y Deva asegura que continuará llevando personalmente sus "marcas de toda la vida"
Esta decisión se la debe en parte al running y a esa nueva faceta deportiva en la que vive centrada. Tal y como ella misma ha señalado, para poder "entrenar en condiciones" y llegar al punto al que ha llegado, necesitaba "una descarga de trabajo".
Así, tras haber aceptado trabajar con una agencia, la influencer tendrá más tiempo para centrarse en sí misma, en su familia y, en definitiva, para "empezar a disfrutar un poquito más la vida sin tanta exigencia".
Las redes de Verdeliss han cambiado mucho desde que se embaucase en su particular reto de 12 maratones en 12 meses (que finalmente acabaron siendo 13). Un cambio que a Unzú le está "gustando un montón" y que, según explicaba hace solo unos días a 'El diario de Navarra', le gustaría poder mantener en un futuro. "Siento que a mí me hace mucho bien y siento que a mi comunidad también. Yo documentaba mucho lo que es mi día a día. Estaba muy ligada a esta parte del ‘lifestyle’, de mi visión como madre, de la rutina que llevo con ocho hijos. Y esto ha ayudado a ver otra faceta. Resulta que esa madre por la que nadie habría apostado un duro, como se me veía, también puede estar marcando historia. Todo es proponérselo", explicaba.