Laura Matamoros dice adiós a su tatuaje más polémico. La ganadora de 'GH VIP' se arrepiente de uno de sus más emblemáticos tatuajes: el que lleva en la oreja. Cansada de las críticas - incluidas las de su propio hijo - la que también fuera concursante de 'Supervivientes' acude a un centro especializado para eliminar la 'flor' que se grabó con tinta en esta parte de su cuerpo cuando tenía 17 años.
La vida de Laura Matamoros ha cambiado mucho desde entonces. Cuando empezó a tatuarse el cuerpo se encontraba, según ella misma ha explicado en más de una ocasión, en una etapa "rebelde" de su vida. Los años y la madurez que otorga el paso del tiempo le ha llevado a tomar una drástica decisión respecto a estos dibujos.
"Es un puñetero tatuaje", decía recientemente, cansada de las preguntas de sus seguidores. "Se ha difuminado, no es un sonotone", explicaba poco antes de acudir a una clínica para borrar con láser este tatuaje de su oreja y otro que tenía en el muslo.
El progenitor de la influencer llegó a querer '"cortarle" la oreja cuando vio lo que su hija se había hecho durante su etapa rebelde en el Reino Unido. Recientemente, la colaboradora de 'Vamos a ver' compartía con sus seguidores la opinión que tiene uno de sus hijos acerca de este polémico diseño.
"Me dice que tengo caca en la oreja", contaba con sentido del humor hace unas semanas a través de sus redes.
Este comentario por parte de Benjamín fue "el remate total" para la sobrina de Mar Flores, que lleva años queriendo quitarse el tatuaje de la oreja, arrepentida. Condicionada por sus seguidores, por la opinión de su padre, pero sobre todo, por la de su hijo pequeño, se ha animado finalmente a hacerlo.
A nadie parecía gustarle este tatuaje. Ni siquiera al experto que se lo está quitando, que ha llegado a cuestionar la profesionalidad del tatuador y ha llegado a preguntar a la influencer que "quién se lo hizo".
Laura acaba de realizarse la primera sesión de láser de las múltiples que necesitará para eliminar por completo la tinta que, desde hace más de 15 años, tiene depositada en una de sus orejas. Será un proceso largo, sin embargo, como ella bien dice, "por algo se empieza".