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Fue en 2008 cuando el público descubrió a Tamara Gorro gracias a su participación como tronista en 'Mujeres y hombres y viceversa'. Desde entonces, el carisma de la madrileña le ha permitido mantener una larga carrera en televisión, como colaboradora, concursante de realities y presentadora, una faceta que ha combinado con su papel como creadora de contenido en redes sociales, donde dos millones de seguidores siguen sus andanzas diariamente. Pero Tamara ha reconocido ahora que era "más feliz" en esa época en la que todavía no contaba con fama ni dinero. Lo ha hecho en Instagram, donde ha publicado un extenso texto sincerándose al respecto.
La extronista ha querido hacer una serie de reflexiones ante su 'familia virtual' (como ella denomina cariñosamente a su comunidad de followers), todo ello con el objetivo de mostrar una realidad que, según ella, "también es Tamara Gorro". Admitiendo en primer lugar que aquellos que la siguen podrían coger con escepticismo sus palabras, la influencer ha explicado que, habiendo estado en el otro lado (el de no contar con fama ni dinero, un pasado del que ya ha hablado en ocasiones), aquello le "compensaba más" haciendo balance. "Era FELIZ", ha escrito, con unas mayúsculas cargadas de significado.
"Con mis quebraderos de cabeza por no llegar a fin de mes. Angustia y desesperación. Pero cuando salía a tomar un vino LO DISFRUTABA. No me sentía juzgada y, lo más importante, la gente que me rodeaba me quería a mí", ha explicado la Gorro. Porque buena parte del texto que ha compartido ha girado, precisamente, en torno a esa idea: la de que mucha gente que la rodea lo hace por lo que tiene y no por lo que es. Un mundo "falso", en sus propias palabras, en el que siempre está en el punto de mira, no puede permitirse cometer un error y en el que los abrazos verdaderos "dejan de existir", según ha escrito la madre de Shaila y Antonio.
Tamara ha admitido que "lo peor de la vida" es terminar con personas "que te hacen sentir solo". En los párrafos que ha escrito reconoce, además, que desde fuera se ve a "una famosa con dinero que sube vídeos, guapa y punto", alguien a quien se juzga y analiza "constantemente". Es por eso que la influencer ha decidido que no le apetece fingir más. "Quiero ser yo, necesito ser yo y esta SOY YO", ha concluido.
Para finalizar, la mostoleña ha explicado que prefiere tener seguidores de calidad, que la quieran de verdad. Y ha cerrado sus reflexiones con unas enigmáticas palabras que parecen dedicadas a sus haters. "Y los que quieran morir matando, felicidades. Porque, como en la vida real sucede, se acaba consiguiendo. Se acaba matando a una persona. Lentamente, pero se hace", ha zanjado.