Susana Molina ha iniciado su tratamiento tras encontrar el origen de su problema de salud. A pesar de que la que fuera ganadora de 'Gran Hermano 14' está esperanzada de por fin acabar con esta pesadilla, no puede evitar enfrentarse a un dilema moral que ha compartido a través de su perfil oficial de Instagram.
Hace apenas unas horas, la joven de Murcia ha compartido una publicación en la que se le veía tomando unas pastillas. Se trata de su medicación contra el SIBO que le han diagnosticado y que da respuesta a muchos meses de problemas intestinales. Una solución que podría poner fin un periodo que se le ha hecho a la influencer un tanto desesperante. Hinchazón, malestar y un largo etcétera de síntomas.
El tratamiento, tal y como ha contado ella misma, consiste en antibiótico. Algo por lo que también han pasado Adara Molinero o Laura Matamoros. Pero hasta ahí ha contado. Y es aquí donde empieza el dilema de la ganadora de 'Gran Hermano 14', que se ha desahogado públicamente a través de las redes sociales.
"Me estáis diciendo que hable más de los antibióticos del SIBO, pero no quiero hacerlo porque...el bajón que me ha entrado leyendo todos los comentarios de la gente que me está diciendo 'a mí no me funcionó de nada', 'voy por el segundo ciclo de antibióticos', 'te vas a destrozar el estómago', 'yo estoy tomando protector', 'no vale para nada' o 'no lo tomes...', me va a estallar la cabeza y al final solo voy a hacer caso a lo que me diga el médico, que para eso me lo ha mandado", ha reflexionado la que fuera participante de 'La isla de las tentaciones' con Gonzalo Montoya.
Un dilema que Susana Molina ha querido hacer extensible a sus seguidores para que entiendan por qué no está siendo tan transparente con este tema. "Ya veremos si me funciona o si no me funciona, pero si a mí me está pasando esto...pienso que quizá no sea buena idea que yo hable más del tema o diga algo porque quizá pueda confundir a alguien que esté en un tratamiento diferente", ha expresado la que fuera ganadora de 'Gran Hermano 14'.