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Más allá de las cocinas y gracias a 'El Musical de tu vida', los espectadores de Telecinco van a poder conocer un poco más a Pepe Rodríguez. El famoso chef del restaurante 'El Bohío', al que le apasiona el vino y un buen plato de cuchara, tiene en su casa a sus comensales favoritos y también los más exigentes: su mujer Mariví Fernández y sus tres hijos María, Jesús y Manuela.
Puede ser que el mejor ingrediente para sus platos resida en que se crió entre cacerolas y fogones junto a su hermano Diego y a ese aprendizaje de las recetas de su abuela le haya añadido el puntito de socarronería para que todo sea irresistible.
Lo cierto es que aunque empezó en el mundo de la cocina por obligación y por la insistencia de su padre, ahora lo que más le gusta al protagonista de esta semana de 'El musical de tu vida' es cocinar y solo hay una cosa que le quita de estar metido todo el día entre fogones: esta es su familia, que es su pilar fundamental.
El cocinero español, que cuenta con una estrella Michelin, sabe que no hay nada como un guiso a fuego lento, pero en el caso de conquistar a su mujer Mariví fue a por todas y a la carrera. Lo suyo fue un flechazo en toda regla y, como no podía ser de otra manera, se produjo en un bar (de Illescas) en el que estaba Pepe de camarero.
Para esa ocasión, el chef utilizó sus armas de seducción. No le quitó el ojo a Mariví Fernández en todo el rato que coincidieron. Ella venía de jugar al tenis con unas amigas y solo quería tomar un refresco. "Me fichó y cada vez que iba a Illescas ahí estaba él, esperándome", ha explicado en alguna ocasión la mujer de Pepe Rodríguez.
De él le enamoró su insistencia, su gusto y maña para la cocina y, en sus propias palabras, que es "una persona muy elegante y todo un señor". Ella, su mujer y con la que lleva compartiendo una relación de varias décadas fue su primera novia y el amor de su vida. Mariví Fernández ha estado siempre en los grandes hitos del chef: cuando arrancó con El Bohío, cuando ganó su estrella Michelin o la fama le alcanzó de lleno.
Bastante celoso de su intimidad, Pepe Rodríguez utiliza sus redes sociales más a nivel laboral mostrando guisos y nuevos proyectos, pero entre todas las publicaciones se cuela alguna dedicada a sus hijos. Su familia numerosa es su gran pasión, aunque la exigencia de su restaurante y sus compromisos laborales no le dejen pasar todo el tiempo que le gustaría junto a ellos
Sus dos hijas y su chico son su gran motor para todo. La mayor María, cumplirá próximamente 22 años. Según su padre es a la que le cuesta más aceptar la fama de este y a la que en su mayoría de edad Pepe Rodríguez le dedicó una preciosa publicación llena de fotos.
"No se puede expresar tanto amor", es como describe el famoso chef lo que siente por su primogénita y lo mismo le sucede si se habla de Jesús. Su hijo mediano es feliz sabiendo que su padre sale en la tele y con él comparte la afición por el deporte. Es habitual verles juntos disfrutando de un partido de fútbol o de tenis.
La pequeña Manuela empieza a ser ya consciente de la gran popularidad que tiene su padre. Él es juguetón y tiene buena mano con los niños y está aprendiendo de la etapa de la adolescencia. Su mejor plato lo hace en su casa cuando apaga los fogones y se sienta y disfruta de tiempo de calidad junto a los suyos.