1200 invitados y fuegos artificiales: así fue la boda de Vicky Martín Berrocal y Manuel Díaz 'El Cordobés'
Vicky Martín Berrocal y Manuel Díaz, 'El Cordobés', se casaron en una multitudinaria boda en Sevilla
El matrimonio de la colaboradora de 'TardeAR' y el torero duró solo cuatro años
Fueron padres de una hija llamada Alba y continúan siendo amigos en la actualidad
La boda de Vicky Martín Berrocal y Manuel Díaz ‘El Cordobés’ fue todo un acontecimiento. La colaboradora de ‘TardeAR’ contrajo matrimonio con el padre de su hija Alba en 1997 en un romántico y multitudinario enlace que fue seguido por millones de personas. Ella, una joven procedente de una familia adinerada; él, el hijo no reconocido de uno de los toreros más importantes de la época. Sevilla y La Giralda se vistieron de gala para celebrar aquella inolvidable unión que terminó en divorcio, pero que acabó siendo la prueba y mejor ejemplo de que dos personas pueden llevarse bien a pesar de su ruptura.
José Luís Martín Berrocal, padre de la novia, se encargó de organizar un enlace de cuento. La niña del ganadero se casaba y quiso que de su enlace fuesen testigos (sin contar con todos aquellos curiosos que se acercaron a las inmediaciones de la catedral de Sevilla para ver a los novios) 1.200 invitados.
MÁS
Lolita, Manuel Díaz ‘El Cordobés’ y Maribel Verdú, primeros invitados a ‘TardeAR’ con Ana Rosa Quintana
Famosos como Vicky Martín Berrocal lloran la muerte del diseñador Cristo Báñez, a los 41 años
Vicky Martín Berrocal confiesa el encuentro que tuvo Manuel Benítez: "Le dije 'es tu hijo sí o sí' y no me lo negó, su mirada..."
“Hubo tanta gente por mi padre, porque como nunca se había casado, pues hizo como que se casaba él. Se le ocurrieron muchas locuras y Manuel se enteró el mismo día de la boda”, recordaba en un programa de televisión. "Yo estaba en el hotel de enfrente de la iglesia, con mi bata puesta y viendo la cantidad de gente que había. Llegué una hora tarde”, añadía la diseñadora, que fue fruto de la relación paralela que su padre tuvo con su bellísima madre, Victoria Martín Serrano.
Su historia comenzó de forma sencilla. Sus primeras citas consistieron en “salir a cenar y tomar un platito de sopa de picadillo". Se enamoraron perdidamente el uno del otro y, el 24 de octubre de 1997 tuvo lugar su esperado ‘sí, quiero’.
Manuel se vistió de corto para el gran día. Vicky, que en la actualidad diseña ella misma vestidos de novia, apostó por un impresionante vestido de seda blanco de cierta inspiración flamenca y detalles bordados diseñado por Pepe Jiménez, amigo de la novia. La parte trasera imitaba un capote, guiño al hombre con el que estaba a punto de casarse. Para la ocasión, la novia, que llegó a la catedral es un llamativo coche de caballos, recogió su pelo en un moño bajo y lo cubrió con un velo, que sujetó a su cabeza con una diadema joya perteneciente a su familia.
1200 invitados y un fiestón por bulerías, sevillanas, con hoguera gitana y fuegos artificiales
Tras prometerse amor eterno, la pareja salió de la iglesia y fue cubierta millones de pétalos blancos. Se besaron delante de todo el mundo por petición popular y se soltaron 200 palomas de color blanco. Desde ahí, se trasladaron a la finca Rancho El Rocío, en Puebla del Río. Previamente, los recién casados hicieron una parada en la capilla de ‘El Baratillo’, para que la novia depositara su ramo ante la Virgen de la Caridad. En la finca, perteneciente a los Peralta, donde un espectacular banquete y una fiesta de película los esperaba.
El menú estuvo compuesto por varios suculentos y deliciosos platos. Crema de alcachofas, bogavante, sorbete de limón al cava, solomillo, tulipa de almendras del paraíso y tarta nupcial fueron los platos que los invitados pudieron degustar. Además de caldo, churros, buñuelos con chocolate, migas y picatostes que se sirvieron de recena, tras la hoguera gitana que montaron de madrugada.
Sevillanas, bulerías… o 20 minutos de fuegos artificiales fueron algunos de los ‘detallitos’ que formaron parte de la boda de Vicky Martín Berrocal y Manuel Díaz, ‘El Cordobés’. Tras la que, sin lugar a duda, fue considerada como ‘la boda del año’, los recién casados se fueron de luna de miel a Bora Bora y a Los Ángeles.
Tan solo cuatro años después y tras el nacimiento de la que sería su única hija en común, Alba Díaz, la pareja decidió separarse. Jamás han tenido una mala palabra para el otro y siempre han demostrado llevarse a las mil maravillas. La exposición mediática o la juventud de ambos en el momento del ‘sí, quiero’, fueron algunos de los motivos que dieron tras su ruptura.