Adara Molinero comparte orgullosa una foto de su hijo haciendo ballet

  • Adara Molinero habla del nuevo hobby de su hijo Martín: la danza clásica

  • La ganadora de 'GH VIP' quiere que su pequeño crezca libre y sin prejuicios

  • El niño, fruto de su relación con Hugo Sierra, está "encantado" y "emocionado" con sus clases de ballet

Adara Molinero tiene clara la educación que quiere dar a su hijo Martín, al que ha apuntado a clases de ballet. El pequeño, fruto de su relación con Hugo Sierra, ya tiene cuatro años y medio y cada día va formando poco a poco su propia personalidad. El baile parece ser una de las grandes pasiones del hijo de la ganadora de ‘GH VIP’, que está recibiendo sus primeras clases de esta danza clásica.

Esta disciplina está sometida a un sinfín de prejuicios. Aunque la línea que separa lo masculino de lo femenino tiende poco a poco a desdibujarse, el baile, y más concretamente el ballet, continúan estando tremendamente estigmatizados. El machismo, la homofobia y la masculinidad frágil hace que muchos hombres (y también mujeres) atribuyan esta danza al género femenino.

Adara, que hace unos días explotaba como nunca contra el padre de su hijo y le acusaba de no ver y ocuparse como debería del pequeño, no quiere Martín crezca bajo el yugo de estas creencias que fomentan la desigualdad.

La que fuera azafata de vuelos antes de participar en su primer reality presume de su “pequeño bailarín”, al que hemos podido ver con sus nuevas puntas de ballet y sus mallas puestas.

El pequeño, que últimamente está teniendo algunos problemas para descansar y conciliar bien el sueño, quiere bailar y su orgullosa madre no piensa frustrar su gran sueño. “Mi hijo ha ido a su primera clase de ballet. No sabéis lo feliz que he sido al verle tan feliz. Antes de ir me decía ‘mamá, ¡estoy emocionado!’”, ha dicho a través de sus redes sociales.

La exconcursante de ‘Supervivientes’ está “educando a una personita libre y sin prejuicios. Libre en sus gustos y en su forma de pensar sin que se sienta reprimido ni presionado”.

Martín está “encantado” con su nueva actividad extraescolar, de la cual ya ha dado varias clases.

Adara no quiere privar a su hijo de cumplir su deseo de formarse en el mundo de esta preciosa danza y por ello, piensa apoyarle y acompañarle durante todo el camino. Desconocemos cómo evolucionará Martín conforme vaya aprendiendo nuevos pasos y movimientos, aunque como su madre, deseamos que llegue muy lejos y que podamos verlo muy pronto bailando de la mano de grandes compañías de ballet.