Tras su ruptura con Adara Molinero, Bosco Martínez Bordiú se refugia en Manuel Cortés. Su amigo y excompañero de ‘Supervivientes’ está siendo un baluarte para el sobrino de Pocholo, que ha decidido dejar Madrid y a su ex atrás y escaparse unos días a Sevilla con el hijo de Raquel Bollo. Agradecido por todo lo que ha hecho por él, el ganador del reality de Telecinco envía un mensaje de agradecimiento a su amigo y a todos los que le han acompañado en este viaje.
“Quiero agradecerle tanto, tanto, tanto estos días en Sevilla que tanto necesitaba… Me alegro de haber esperado 25 años para venir porque ha sido increíblemente increíble”, ha dicho refiriéndose a su amigo “Manolito” mientras deja constancia de lo importante que han sido para él estos días de desconexión.
Era la primera vez que Bosco visitaba la capital hispalense. Sevilla, su gente y forma de ver y entender la vida no han defraudado al joven, que ha prometido volver. Sus días han estado llenos de “flamenco, bulerías y mucho arte”, porque allá “por donde pasa el Guadalquivir la gente sí que sabe vivir”.
Manuel Cortés y la gente de Camas se han convertido en los perfectos anfitriones para Bosco Martínez-Bordiú, que jamás olvidará este viaje.
“Mi casa es tu casa y lo sabes, te veo pronto hermanito”, ha respondido el hermano de Alma Bollo, para quien Bosco es ya una persona muy importante en su vida.
Paseos por el centro de Sevilla, fotos en el puente de Triana y una noche en la aldea de El Rocío (Huelva) visitando su preciosa ermita son solo algunos de los planes más turísticos que Manuel Cortés ha preparado a su amigo, que nunca antes había estado en su tierra.
Muy agradecido por haber podido desconectar de todo tras su reciente ruptura con Adara Molinero, el ganador de Supervivientes 2023 ha querido compartir algunos recuerdos de esta magnífica escapada.
“Qué puedo decir… qué increíbles momentos. Gracias a la gente de Camas, al flamenco, y a las bulerías. A sacarme a bailar y aprender a palmear. Por los piribís, las cañitas en barra y el arte. Por el río Guadalquivir que allá donde vaya la gente sí que sabe vivir ¡Gracias!