Raquel Arias casi se cuela en la final de la última edición de 'Supervivientes', pero no contó con el apoyo del público y tuvo que volver a España, donde continuamente recuerda con mucho cariño su estancia en los Cayos Cochinos. La ahora colaboradora de 'Así es la vida' sigue teniendo tan presente su paso por el concurso que le ha confesado a sus seguidores que conserva un hábito de su aventura hondureña.
Se trata de la costumbre de beberse un coco al día y así lo ha explicado ella misma en sus stories de Instagram ante sus 92.000 seguidores. "¿Estoy aún en Honduras o en Madrid? ¡Esto es real!", ha comentado la modelo junto a un vídeo en el que aparece bebiendo de una pajita de el agua de un coco, uno de los alimentos básicos en la dieta de cualquier superviviente, que está limitada a esa fruta, a las almendras, el pescado, el arroz, las lentejas y lo que haya en las latas que les proporciona la organización cada semana para que coman algo de proteína y su salud no resienta.
"Muchos sabéis que desde que lo probé en Honduras tengo obsesión", ha confesado la extremeña, que está feliz porque le ha contratado una marca que comercializa productos hechos a partir de este alimento para que haga publicidad de los mismos en sus redes sociales y es que, gracias al impulso en cifras que ha experimentado su perfil de Instagram, puede trabajar ahora como influencer.
Precisamente ha sido a través de sus stories donde ha contado que no solo ha incorporado a su dieta el coco desde que estuvo en Honduras, sino que esta experiencia le ha hecho darse cuenta de que le encanta ir todo el día en bikini, sin tener que preocuparse por elegir un outfit diferente cada día. En casa, para recordar todos los días su paso por uno de los realities más famosos de la televisión, tiene el vaso en el que bebía agua en los Cayos Cochinos, el coco en el que comía y el cofre que le regaló el Pirata Morgan por haber conseguido capturar más de cien peces.