Carla Barber habla de la actitud de su hijo Bastian tras la llegada de Bosco

  • Carla Barber explica lo mucho que ha cambiado Bastian desde la llegada de su hermano pequeño

  • La exconcursante de 'Supervivientes' intenta dividir su tiempo en el cuidado de sus dos hijos

  • Desde que Bosco llegara a sus vidas, su primogénito ha mostrado un comportamiento diferente

Carla Barber dio a luz a su segundo hijo hace unos meses. La vida de la exconcursante de ‘Supervivientes’ ha cambiado mucho desde entonces. Ahora debe dividirse entre sus dos retoños, que con 1 año y menos de tres meses respectivamente, reclaman gran parte de sus atenciones. Ante esta realidad, la doctora ha querido hablar, pues ha notado un importante cambio de actitud de su hijo Bastian tras la llegada de Bosco.

Su “príncipe”, como así se refiere a su primer vástago en común con su ex Joseph Rodríguez, es – según ella – su favorito. Acostumbrado a ser el rey de la casa, Bastian ha tenido que aprender a compartir, aunque no parece estar llevándolo demasiado bien.

“Está supermimoso, o sea, exageradamente mimoso”, explica la novia del doctor Carlos Rubí. “Cuando ve que cojo a Bosco se muere”, comenta sin entrar más detalles mientras habla de los berrinches que tiene desde que el nuevo bebé Barber llegara a sus vidas.

Los celos entre hermanos son completamente normales, más si hablamos de un bebé que acaba de cumplir su primer año de vida. Es probable que dentro de un tiempo desaparezcan, aunque por ahora esta es la realidad con la que tiene que lidiar Carla en estos momentos.

La modelo, que fue coronada Miss España en el año 2015, intenta dividir su tiempo en sus dos pequeños, sin embargo, a Bastian no parece gustarle. El niño quiere ser el centro de atención de su madre y no duda en reclamarla cada vez que tiene a su hermanito en brazos.

A su maternidad, Carla tiene que sumar su trabajo en la clínica y su frenética actividad diaria en redes sociales. En ocasiones reconoce no llegar a todo y pide ayuda desesperada a su familia, siendo su madre, Rosa Barber, su gran apoyo en todo esto. Aun así, Carla es capaz de entrenar, de llevar su clínica, de viajar, de quedar con sus amigos y de tener tiempo libre para disfrutar con su novio cirujano.  

Cuando llega a casa, agotada de su intensa jornada, baña a “Bastiancito”, le da “el bibi” y lo deja “dormidito” en su cunita. Pero para su hijo Bastian, que nota cómo ha dejado de ser el protagonista absoluto en la vida de Carla Barber, esto no parece ser suficiente. Algo que la influencer ha detectado y que le ha llevado a hablar del cambio de actitud que éste ha tenido de un tiempo a esta parte.

“No siento los brazos del tiempo que llevo cogiéndole, no puedo sentarme o tumbarme con él. Solo deja de llorar si estoy de pie, y a veces ni eso, se pone a llorar esté como esté sin parar. Me demanda más que nunca, llora cada vez que me ve para que le coja… Una locura. No puedo soltarle ni dárselo a nadie para descansar los brazos porque se pega como una lapa y se agarra como un koala”, contaba días después del nacimiento de Bosco mientras ponía de manifiesto un problema al que no parece haber encontrado solución.