Alejandro Pérez, entre lágrimas, se derrumba al contar que ha roto definitivamente con Sheila González

Alejandro Pérez ha tenido su momento para abrir su corazón y expresar cómo se siente. Totalmente destrozado por los hechos que se han precipitado en las últimas semanas, el exparticipante de la sexta edición de 'La isla de las tentaciones', entre lágrimas, se ha derrumbado al contar que ha roto definitivamente con Sheila González.

La noticia ha pillado totalmente por sorpresa a sus seguidores dado que recientemente Sheila González había confirmado su inesperada reconciliación. Sin embargo, la pareja no ha podido superar este momento que les ha terminado sobrepasando. "Volvimos a sentir mariposas", ha comenzado diciendo contenido para después romperse por completo al hacer público que lo suyo nuevamente no ha funcionado.

La historia entre Alejandro Pérez y Sheila González ha sido intermitente desde que comenzaron. Con ella estaba el modelo cuando conoció y sintió un flechazo por Laura Boado. A partir de ahí, Alejandro Pérez inició una relación con la copresentadora ahora de 'First Dates', pero ambos no lograron superar su paso por 'La isla de las tentaciones'. Por su parte, Sheila González ha tenido varios acercamientos con Mario González y tras su sonada y última ruptura volvió a los brazos del modelo madrileño.

Tras repasar cómo han sido sus últimas semanas juntos, Alejandro Pérez se ha emocionado al recordar todo lo que juntos han vivido. "Me dolió su beso con Napoli", ha contado, aunque la realidad es que ninguno de los dos estaba preparado en ese momento para llevar el peso de una relación. Sin embargo, el exparticipante de 'La isla de las tentaciones' ha enseñado algunas fotos de los momentos íntimos y felices que han vivido y no ha podido evitar emocionarse.

Alejandro Pérez ha reconocido que Sheila González acaba de salir de lo que él considera "una relación tóxica", que no tiene la cabeza para poder centrarse en ellos dos y él también asume parte de la responsabilidad de que no haya funcionado este acercamiento, aunque se sigan apoyando y queriendo mucho.