Naomi Asensi habla de su operación de estrabismo y sus consecuencias: "Costó el divorcio de mis padres"
La participante de 'La isla de las tentaciones' ha explicado por qué su operación separó a sus padres
Naomi Asensi ha aclarado las dudas de todas las operaciones estéticas y retoques que se ha hecho
Naomi Asensi se ha sincerado sobre los motivos que le han llevado a pasar varias veces por el quirófano. La nueva sensación de la sexta edición de 'La isla de las tentaciones' no ha dudado en hablar del desastre estético que sufrió por una operación de mentón y ahora ha querido ir un poco más allá sacando el tema de su operación de estrabismo y las consecuencias que tuvo para su familia.
Haciendo un ejercicio de sinceridad, Naomi ha relatado el mayor problema que tenía de niña. "Tenía un ojo en Cuenca", ha relatado sin perder su toque de humor para 'Mi momento' en mtmad. Tanto es así que desde bien pequeña tuvo que someterse a una primera operación a la que años después le han seguido otros retoques.
MÁS
De esa etapa, la exconcursante de 'La isla de las tentaciones' ha querido destacar que el mayor apoyo fue su madre. Ella es la que se empeñó de todas las formas posibles en corregir este problema en los ojos de la valenciana. "Fui la bebé más pequeña operada en Europa", ha explicado para que se entienda lo que se insistió en su operación de estrabismo, aunque esto terminó pasándoles a todos factura.
Y si la concursante de la sexta edición de 'La isla de las tentaciones' ha ido contando uno a uno todos los motivos que le han llevado a hacerse varias operaciones, sí que le ha resultado más difícil el ver todo lo que supuso su operación de ojos. "Esto les costó el divorcio a mis padres", ha contado por primera vez la novia de Adrián Blanch con detalle.
Muchos se han quedado sorprendidos por esta respuesta, pero la valenciana no ha dudado en su testimonio. Si ella se confiesa una apasionada de los tatuajes y los retoques estéticos, la realidad es que la primera operación a la que se sometió fue por pura necesidad y generó un cisma familiar que aún hoy recuerda