Noemí Salazar ya cuenta las horas para dar a luz a su segundo hijo. Pero, aunque tiene muchas ganas de poder estrecharlo en su regazo, la integrante de 'Los Gipsy Kings' prefiere que el bebé espere unos días más para su nacimiento. Y es que Antón, su marido, se ha marchado a Australia en plena recta final del embarazo, a pocos días del parto. Algo que le tiene a la también exconcursante de 'GH VIP' muy preocupada y triste.
La reina del brillo ha mantenido actualizados a sus seguidores del minuto a minuto de estos nueve meses mágicos para ella. Una dulce espera repleta de emocionantes momentos que perdurarán en su memoria para siempre. Una espectacular fiesta de revelación del sexo, una 'baby shower' de película y un sinfín de ecografías 5D en las que la 'pijitana' ha podido conocer las facciones de su pequeño, que llega con "unos morros muy gordos" que ya le vuelven loca.
Pero, ahora, en plena recta final de su embarazo, la que fuera participante de 'Los Gipsy Kings' se enfrenta a un importante reto personal; estar separada de su marido en los días previos al parto. Tal y como ha explicado ella en su perfil oficial de Instagram, donde le siguen más de un millón de seguidores, Antón se ha visto obligado a poner rumbo a Australia por motivos de trabajo.
Un viaje con escalas y muchísimas horas de vuelo por delante que su marido no ha podido eludir y que tiene a Noemí Salazar bastante preocupada. Ya no solo por el hecho de que el nacimiento del bebé pueda pillarle a tantos kilómetros de distancia, sino por su miedo a los aviones.
"Esperemos que Antoñito (como va a llamar a su bebé) espere y que no salga todavía porque hoy justo se ha ido Antón y estoy un poco mal, la verdad. Estoy muy triste. Yo creo que es porque se ha ido muy lejos y que con el tiempo me he vuelto más miedosa y le tengo mucho respeto a los aviones", ha reconocido la que fuera concursante de 'Gran Hermano VIP'.
Pero igual de consternado está Antón, que ha hecho las maletas y ha abandonado España con el deseo de su pequeño no nazca en las próximas horas. "Él se ha ido fatal, ayer estaba desencajado, aunque a mí no me lo decía. Está preocupado porque se ha tenido que ir a trabajar sabiendo que estoy a puntito de caramelo", señala la madre de Mimi, que hoy mismo tenía una importante cita médica en el hospital a la que ha ido acompañada de su madre.
Pero por mucha cita de monitores para comprobar que todo siga su curso hasta el parto, Noemí Salazar tiene la mente ocupada pensando en Antón. "Os voy a pedir que oréis por él para que el viaje sea perfecto y todo salga bien", les ha rogado la que fuera participante de 'GH VIP' a su legión de seguidores, en los que se va a apoyar mucho durante el tiempo que dure la esta ausencia. "Os iré informando", les ha prometido.
Así, mientras la protagonista de 'Los Gipsy Kings' acude a sus últimas revisiones antes del parto, su marido hace frente a un viaje de diez horas hasta Doha, capital de Catar, donde hace escala hasta Australia después de otras 16 horas de vuelo. "Es una locura de viaje", se ha lamentado la integrante de 'Los Gipsy Kings', que ha aprovechado para lanzar un zasca a los que dicen que su familia "vive del cuento". Aunque su trabajo tiene muchas cosas buenas, como el suyo propio, por su profesión, Antón "sacrifica muchos momentos". Como este, a pocos días del nacimiento de su segundo hijo.