Marina García pasa por quirófano para someterse a una nueva operación, que más que estética, responde a un problema que arrastra desde hace tiempo y que dificulta su día a día. La exparticipante de 'La isla de las tentaciones' se ha sometido a una turbinectomía, cirugía que ha querido realizarse en Córdoba con el mismo cirujano que le realizó su segunda rinoplastia.
La novia de Jesús Sánchez ha viajado en coche de madrugada para poder estar en el hospital a las 8 de la mañana, hora a la que ha entrado en quirófano para ser operada de la hipertrofia de cornetes que le impide hacer vida con normalidad. La pareja ha salido de Madrid - su nueva ciudad de residencia -, a las 4:30 horas de la mañana; ha sido él el que ha conducido hasta Córdoba.
Tal y como explican desde la clínica del Doctor Galindo, los cornetes nasales son pequeñas estructuras que se encuentran en la parte interna de la nariz, cuya función principal es la de calentar, filtrar y humidificar el aire que se respira a través de las fosas nasales hacia los pulmones. Estas estructuras se encuentran formadas por hueso delgado cubierto por membranas mucosas y esponjosas.
Marina García sufre desde hace años una hipertrofia de estas membranas que le dificultan respirar con normalidad. Unido a sus problemas de alergia, la de 'LIDLT' estaba desesperada.
Marina lleva tiempo evitando el quirófano. Sin embargo, sus problemas respiratorios han aumentado de un tiempo a esta parte. Esta misma mañana, la joven sevillana ingresaba en el hospital para someterse a esta intervención. Dependiendo de la técnica utilizada, la turbinectomía puede tener una duración de entre 30 y 90 min. Hace solo unos minutos, la sevillana ha reaparecido dando detalles de esta intervención, que para ella sería su tercera operación de nariz.
"Todo genial, chiquis. Ha sido superrápido. Ahora mismo no siento nada de dolor, ni molestias, 0 inflamación. Ni siquiera me han puesto tapones en la nariz", ha dicho tras salir del quirófano del hospital San Juan de Dios, en Córdoba.
Se trata de un procedimiento sencillo y de bajo riesgo que puede ser llevado a cabo tanto por anestesia general como por anestesia local. La turbinectomía es un procedimiento médico basado en la eliminación parcial o total de los cornetes nasales, normalmente bajo visión endoscópica para una mejor visualización del interior de la nariz.
Dependiendo del grado de hipertrofia, del riesgo que exista de que vuelvan a crecer y de los antecedentes del paciente, se removerán íntegros o de forma parcial. La técnica más común para la hipertrofia de cornetes es la radiofrecuencia, que quema y provoca necrosis en los tejidos inflamados. Tras ser quemados, la nariz del paciente sufrirá una reacción inflamatoria propia de la intervención.
Tal y como ha dejado ver Jesús Sánchez a través de sus stories de Instagram, esta técnica de "quemado" podría haber sido la utilizada por el cirujano de Marina García.
Existen alternativas más duraderas, aunque más invasivas. La cirugía es la mejor opción en este sentido, aunque su cicatrización es más lenta y existe riesgo de que surjan costras y pequeños sangrados. Según el blog de Medicina y Salud de la Universidad Europea, "ninguno de estos métodos deja cicatrices duraderas, por lo que el aspecto y el tamaño de la nariz no quedaría modificado una vez terminase el postoperatorio".