Adara Molinero lanza un inesperado dardo a Hugo Sierra, el padre de su hijo Martín. La exconcursante de 'Supervivientes All Stars' ha retomado su faceta de creadora de contenido en las redes y, durante uno de sus últimos trabajos publicitarios, ha cargado de manera totalmente inesperada contra el padre de su hijo.
No es la primera vez que la ganadora de 'Gran Hermano VIP' cuestiona el papel de su ex como padre. La hija de Elena Rodríguez le acusa de no ver al pequeño lo suficiente y de no hacerse cargo de sus cuidados. Precisamente esta es una de las grandes preocupaciones de Molinero, para quien su hijo es lo mejor que le ha pasado en la vida.
Adara conoció a Hugo y, apenas un mes después de empezar a salir, se enteró de que estaba embarazada. Apenas se conocían y su relación, como los espectadores de Telecinco recordarán, no llegó a buen puerto. Desde entonces, los problemas no han cesado para ellos, que a día de hoy parecen seguir enfrentándose por el pequeño Martín.
La que fuera azafata se ha prestado para grabar un comercial publicitario en el que también ha respondido a una serie de preguntas. Preguntada por su capacidad para compaginar su trabajo en televisión con su maternidad, Adara ha respondido de forma rotunda.
"A veces se hace difícil porque le tengo que dejar con su padre", dice con una tranquilidad y una seguridad absoluta con la que prueba que su relación con Hugo podría continuar siendo tan fría, tirante y distante que siempre.
De estas palabras se deduce que, muy a su pesar, fue con su padre, Hugo Sierra, y no con la abuela materna, Elena Rodríguez, con quien el pequeño Martín, que ya tiene cinco años, pasó las pocas semanas que Adara estuvo participando en 'Supervivientes All Stars'.
Por otra parte, este último dardo hacia su exnovio llama la atención cuando menos. Y es que, hace menos de un año, Adara se quejaba de lo poco que Hugo veía a su hijo y le exigía que pasase más tiempo con él. "Es desesperante, solo me quedan ganas de llorar. Le digo que por favor le vea más y me dice que no puede", decía muy enfadada mientras aseguraba que el uruguayo solamente veía al niño unos tres o cuatro días al mes.