Después de dos meses y medios, las máquinas han comenzado la limpieza del vertedero incontrolado de más de 20.000 metros cuadrados situado en la pedanía valenciana de Castellar, donde se acumulan toneladas de desechos procedentes de las localidades afectadas por la DANA. "Nosotros trajimos hasta aquí toneladas de deshechos de municipios como Alfafar. Teníamos dos tractores y un remolque y acudimos a ayudar a la zona afectada retirando todo lo que podíamos de las calles", explica Vicente, un vecino del Perellonet, que estuvo trabajando junto a otros compañeros en las labores de limpieza días después de las inundaciones.

Los trabajos han comenzado después de las quejas de los vecinos y del Ayuntamiento de Valencia, que reclamaban al Gobierno la limpieza de la zona.

Las máquinas retiran muebles, electrodomésticos y todo tipo de enseres que estaban generando numerosos problemas entre los vecinos que residen a pocos metros del abocador ilegal. "Hay muchas ratas. Es insalubre para las personas y para el campo y un foco de infecciones", lamenta María, vecina de Castellar.

Pilar, que vive a unos pocos metros del vertedero, mira con alivio el inicio de los trabajos de limpieza. "Hay mucha basura y polvo y esto no se acaba nunca", afirma.

La queja es generalizada. "Nos sentimos abandonados. Después de dos meses esto podría estar más arreglado, pero nos tendremos que aguantar", señala Cándido.

Denuncian falta de medios materiales y humanos. "Debería haber ido mucho más rápido. No ha habido suficiente ayuda para limpiar. Nos han olvidado. Si hubieran venido los medios necesarios ya estaríamos viviendo en la normalidad", asegura un vecino.

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