11 investigados por vender más de 40 toneladas de miel ecológica contaminada de China
Investigada una empresa por comercializar miel de China con más pesticidas de los permitidos
La compañía habría falsificado la documentación para tratar de burlar los controles sanitarios
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Primera operación a gran escala relacionada con la producción y la comercialización de miel a nivel europeo que ha acabado con 11 investigados. Por vender este producto contaminado, procedente de China.
Así lo ha comunicado este sábado la Guardia Civil. Precisamente en junio en Informativos Telecinco ya hablamos de la caída de la miel española, en parte porque se está importando del citado país asiático.
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Eso era lo que hacía la empresa que ha sido inspeccionada por la Benemérita por comercializar más de 40 toneladas que superaba la cantidad máxima de pesticida autorizada en Europa. Por tanto, suponía un riesgo para la salud de los consumidores.
Documentación falsa y encima miel ecológica
Los agentes explican que habría falsificado la documentación para tratar de burlar los controles sanitarios. En los análisis realizados se comprobó que el producto contenía mayores residuos de los permitidos. Y encima se vendía como ecológica certificada.
Gracias a la colaboración ciudadana se iniciaron las investigaciones en 2022 y efectivos del Seprona pusieron el foco en una de las mayores empresas del sector en España.
Estuvieron buscando las posibles irregularidades que estaría cometiendo la compañía dedicada a la importación y exportación a nivel internacional. Analizaron un total de 250.000 archivos y más de 5.000 correos electrónicos.
Así pudieron descubrir esos ilícitos penales, pues eliminaba la presencia del componente químico mezclando la miel china con otra de otro país europeo. Con el objetivo de "diluir" su concentración.
Acreditada la falsificación de lotes
Tras el estudio documental, los agentes pudieron acreditar que falsificaron las declaraciones que hacían para exportar los lotes y venderlos. Las autoridades europeas han activado los mecanismos de control para evitar que se siga comercializando el producto.
El Seprona también trabaja para que se cumpla el compromiso de seguridad alimentaria en los alimentos. Y así prevenir futuros delitos y perseguir a los infractores. A los investigados en este caso se les acusa de varios delitos de organización criminal, contra la salud pública y falsedad documental.
La Operación Matrihoney ha sido dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Paterna (Valencia), aunque ha colaborado la Unidad Central Operativa de Medio Ambiente (UCOMA).
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