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Atrapado en Cancún entre la vida y la muerte. Así está Adrián, un valenciano que sufrió una parada cardiorespiratoria en su luna de miel y, desde entonces, está en una UCI. Marta, su cuñada, ha explicado que: “No se le puede mover ni puede viajar a España porque está crítico”.
La Embajada Española en México dice que no puede repatriar a Adrián a un hospital español como se hizo con el vasco que enfermó en Tailandia, ni tampoco puede cubrir los gastos de hospitalización.
El hospital donde permanece ingresado Adrián cuesta 8.000 euros diarios. La compañía de seguros se ha hecho cargo de una factura, que supera los 20.000 euros, pero se niega a abonar nada más que supere la cobertura de la póliza.
El objetivo de su mujer, Sofía Parada, es "despertar cuanto antes de esta pesadilla". Espera poder "regresar pronto a casa, pero sobre todo que Adrián se recupere". Adrián está en una situación de riesgo vital y no se le puede mover. Por ahora, hay que espera hasta conocer la evolución del coma.
Su localidad, Alzira, ha comenzado a movilizarse para recaudar dinero.
Asociaciones vecinales han comenzado a organizar colectas benéficas para recaudar dinero. La federación de moros y cristianos destinará toda la recaudación de una rifa durante el Mig Any Fester y el club de atletismo ha organizado una marcha solidaria.
El alcalde de Alzira, Alfons Domínguez, ha explicado en declaraciones recogidas por el diario El Levante-EMV que “no es fácil que una administración pública aporte dinero público para resolver una situación privada, puesto que hay muchos casos de estas características. Sí que se contempla como ayuda pública el traslado de accidentados en otros países, pero no es el caso actual porque no puede moverse por recomendación médica”.
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