Algunos no disimulan su alegría, al fin llegó el día de la nueva normalidad Han sido semanas, meses duros, y se sienten algo más libres, al fin pueden escapar de la ciudad o cumplir algún sueño labrado en el confinamiento. Más libres, pero aún con cuidado, no sea que volvamos a la casilla de salida. Volver a reencontrarse con la familia en otras provincias es el sueño más anhelado, ahora que empezamos a disfrutar de la nueva normalidad.
El estado de alarma activado en España desde el 14 de marzo para contener el coronavirus ha terminado. El sábado 20 de junio fue el último de los 98 días de periodo excepcional de limitaciones a las relaciones sociales, la movilidad y la actividad que tuvo que poner en marcha el Gobierno de Pedro Sánchez para evitar la propagación del virus.
El 14 de marzo de 2020, el Gobierno declaraba el estado de alarma en todo el territorio durante 15 días con medidas de severa restricción al movimiento de personas y la actividad económica. Fue entonces cuando varias ciudades, entre ellas, Sevilla, suspenden los actos de la Semana Santa. Ese mismo día, millones de españoles salían a sus ventanas y balcones para agradecer con aplausos el trabajo de los profesionales sanitarios, gesto que desde entonces se ha repetido cada día a las 20:00 horas.
El estado de alarma vació las calles de todas las ciudades y pueblos españoles. Desde entonces, se impusieron sanciones a quienes incumplían la norma. Un día después de declarar el estado de alarma, el Ejecutivo anunciaba un paquete de medidas que incluían el control de la sanidad privada, la contratación de personal sanitario y el despliegue de los cuerpos de seguridad del Estado y las fuerzas armadas para así poder garantizar el control y la seguridad de los españoles.
98 días después de que se decretase el estado de alarma, la nueva normalidad le ha tomado ya el relevo. El coronavirus ha sido el causante de 28.322 muertes y 245.938 contagios, según el Ministerio de Sanidad. Sin embargo, hay varios estudios que afirman que si no se hubiese decretado este estado de alarma, las muertes hubiesen ascendido hasta los 450.000 fallecidos.
La lucha contra la pandemia continúa, pero desde esta medianoche lo hace ahora en un escenario diferente en el que se quiere, sobre todo, recuperar la actividad económica y aliviar las restricciones que han marcado la vida diaria de los ciudadanos.
Los españoles tendrán que continuar utilizando mascarillas, deberán mantener la distancia de seguridad y las medidas estrictas de higiene para prevenir el contagio, pero se flexibilizan los desplazamientos, las reuniones y otras actividades.
Desde ahora, las comunidades autónomas tomarán el control de los aforos en los establecimientos y regularán las medidas de control que afectarán también a las actividades de ocio nocturno, entre otros ámbitos.