Quedan menos de tres semanas para la vuelta al cole y todavía hay mucha incertidumbre y preocupación entre los padres y entre los propios profesores. Cada comunidad está diseñando su plan de seguridad y algunos colegios han empezado a delimitar espacios para cada alumno.
Por el momento se desconoce si es posible o no volver de forma presencial, se sabrá a finales de agosto, pero la comunidad educativa apuesta por que sí. Muchos centros ya han comenzado a prepararse para evitar la propagación del coronavirus.
Lo más difícil será controlar los contagios entre los más pequeños, que ni llevan mascarilla ni dejan de tocarse. Los expertos recomiendan entradas al cole de forma escalonada, para evitar aglomeraciones, clases por grupos como mucho de 10 niños.
Las comidas y meriendas, en el interior, y habrá que limpiar y ventilar varias veces al día las aulas. De momento las comunidades piden al Gobierno normas comunes a todas las escuelas para no improvisar y que no haya 17 vueltas al cole distintas.