“Pido a la gente del Reino Unido que me apoye”. "Ayúdanme a librar esta batalla. No aceptéis sin más que no pasó nada. No se trata de una sórdida historia sexual. Cuento cómo se traficó conmigo, cuento una historia de abusos y en ella está implicado alguien de vuestra realeza", pidió Virginia Giuffre, la mujer que denunció al millonario Jeffrey Epstein y al príncipe Andrés de ser víctima de abusos sexuales.
"Le imploro a la gente del Reino Unido que se ponga de mi lado, que me ayude, que no acepte estas cosas", reclamó la mujer que en su primera entrevista televisiva en la BBC, reiteró que fue víctima de una red de esclavas sexuales que dirigía el millonario Jeffrey Epstein, fallecido en sospechosas circunstancias en la cárcel.
El millonario estadounidense supuestamente se suicidó en una cárcel de la ciudad de Nueva York en agosto mientras esperaba afrontar un juicio por cargos federales de tráfico sexual.
Giuffre tenía 17 años la primera vez fue forzada a mantener relaciones sexuales con Andrés. De aquel encuentro se conserva una foto del príncipe pasando su brazo por la cintura de la joven, con Ghislaine Maxwell, la mujer sospechosa de proporcionar las jóvenes menores de edad, a Epstein.
El duque de York, de 59 años, el segundo hijo de la reina Isabel II, niega las acusaciones o haber tenido alguna relación con Giuffre, quien anteriormente se llamaba Virginia Roberts.
La entrevista de la BBC con Giuffre fue realizada antes de que el hijo de Isabel II hiciera declaraciones sobre el escándalo en el que está envuelto él en primera persona; en la entrevista no mostró empatía alguna por las víctimas de Epstein, ni remordimientos por su amistad con el multimillonario. Las reacciones en su contra lo llevaron a renunciar a sus obligaciones reales, mientras organizaciones benéficas y otras entidades se distanciaron de él.