Ethan Mast y Kourtney Aumen una pareja de 35 y 21 años residente de Misuri, EEUU, está acusada de asesinato en segundo grado, entre otra serie de cargos, por la muerte atroz de su vecina, una niña de solo cuatro años.
Sobre la una de la madrugada del domingo, una alerta en una zona rural cerca de la ciudad de Cole Camp, hizo que los agentes del condado de Benton, se desplazasen hasta allí, donde encontraron a la pequeña, de cuatro años envuelta en una manta en el suelo de un dormitorio, según publica ‘ABC News’ que informa que, cuando llegaron, la menor ya estaba muerta y tenía “graves hematomas” por todo su cuerpo.
Según informa la Policía de Benton en un comunicado difundido en su página de Facebook, la pareja agredió a la familia entera. El padre, James Mast, de 28 años, declaró que la niña había sido golpeada, sumergida en un estanque y abandonada en un banco para que se congelase antes de que la trasladasen a la vivienda.
También su mujer, Mary S. Mast, de 28 años, y su otro hijo, de solo dos, fueron agredidos durante días. De hecho, estos tuvieron que ser trasladados al Hospital Regional Bothwell en Sedalia, donde se recuperan.
La Policía, que mantiene una investigación abierta, no descarta que se produzcan más detenciones además de Benton, Ethan J. Mast y Kourtney T. Aumen por lo ocurrido. Tanto la pareja de agresores como las víctimas pertenecían al mismo grupo religioso por lo que, en el marco de la investigación, se investiga este móvil. Aunque comparten apellidos, no son miembros de la misma familia, aclaran.
El padre de la niña fallecida declaró también que las agresiones llevaban días sucediéndose. Los vecinos maltrataban a sus hijos y él y su mujer se limitaban a observar. Cuenta que estaban amenazados de muerte si hacían lo contrario. Además, admitió que les dijeron que su mujer tenía un “demonio” dentro y que los niños terminarían como ella si no les cuidaban.
Por su parte, Ethan Mast declaró a los investigadores que el sábado, él y Aumen usaron un cinturón de cuero para golpear a la niña. Tras la paliza, la llevaron a un estanque detrás de la casa donde la sumergieron en el agua antes de regresar a casa de las víctimas.
A falta de conocer los resultados de la autopsia, la Policía cree que la menor murió como consecuencia de los golpes y la pareja se enfrenta como mínimo a un cargo de asesinato en segundo grado.