Beatriz recibió un último audio de su hija Olivia, encontrada muerta en el mar, y muerta de un edema pulmonar según la autopsia, en el que le pedía que fuera a la casa de Tomás a las nueve para recoger los cuadros de la Tata. Eran las 19:50 horas y era un cambio en los planes. Esta es una de las grandes incógnitas del auto que desgrana los movimientos de Tomás Gimeno y que desvela algo que se desconocía: el maltrato continuado con amenazas y vejaciones al que Tomás sometió con mensajes y llamadas a Beatriz porque esta había iniciado una nueva relación que él - que la engañó y que también tenía otra relación- no aceptaba.
El trágico día 27 de abril para reintegrarlas en el domicilio materno y lugar de la residencia de las menores a las 21.00 horas.
Beatriz fue a la casa de Candelaria pasadas las 21:00 horas aparcando el vehículo en la puerta tras lo que entró caminando , sin ver el vehículo de Tomás, cogió los cuadros que le habían dicho y llamando a Tomás. Este le dijo que iban a comer algo y que le dejaría a Anna en su domicilio de Radazul.
Tomás a las 21:05 salió de la casa presuntamente con las niñas sin vida en el interior del coche por lo que no se entiende por qué citó a la madre a las 21:00 horas. A las 21:13 dejó a escondidas en casa de sus padres dos tarjetas de crédito y dos llaves de su Alfa Romeo negro.
Pero Tomás quería que Beatriz fuera a la casa. Es una de las novedades del auto junto que Tomás sí que entregó a su pareja actual en un estuche en el que había 6.200 euros y una carta de despedida. Pidió a su pareja que le llamara a las 23:00 aunque esta abrió el paquete a las 17:20. Tomás llevó a Olivia a clases de tenis hasta las 18:30 horas. Mientras su hija estaba en el tenis probó si su lancha funcionaba correctamente. Recogió a Olivia y llevó a las niñas a a casa de sus padres. Estuvo hasta las 19:26 horas.
A las 21:51 Beatriz se puso en contacto con Tomás y fue cuando este le dijo que estaba fuera con las niñas. A las 21:59 le dijo a Beatriz que no las iba a ver más y que iba a empezar una nueva vida. A las 22:30 y 22:40 Beatriz ya llamó desde el puerto de la Guardia Civil y Tomás le contestó lo mismo. A las 22:30 arrojaba a sus hijas al mar. A esa misma hora Tomás llama a Beatriz y dice a Beatriz que no puede permitir que sus hijas crezcan sin él. A las 22:44 se queda sin batería. Regresa al puerto. A las 23:15 le multan.
A las 23:45 se dirige a una gasolinera porque el vigilante tampoco tiene cargador compatible con su móvil. A estas horas la madre ya ha estado en el cuartel, pero nadie alerta de que Tomás no ha devuelto a las niñas. A las 00:41 el teléfono de Tomás vuelve a estar operativo. A las 2:05 Tomás mandó un mensaje a su padre diciendo que sentía por él pero que necesitaba hacer esto y que por fin iba a estar bien. A las 02:27 es el último mensaje de Tomás. El resto ya se conoce. Ahora la prioridad es encontrar los cuerpos de Tomás y Anna.