Impresionante la tormenta que caía ayer a última hora en Ourense. Lluvias torrenciales, vientos huracanados y una fuerte granizada que han dejado balcones y tejados desprendidos, árboles caídos, calles inundadas y puentes convertidos en acueductos.
Los servicios de emergencia no daban abasto anoche en Ourense. Los vecinos no daban crédito. Un vecino grabó como el viento arrancaba de cuajo el tejado de un pabellón deportivo, dejando la piscina al descubierto.
Aunque para piscina la que se formó en el puente romano. Tres jóvenes –valientes o imprudentes- lo atravesaron como pudieron dejando perplejo a más de uno.
Los hosteleros trataban de salvar sus negocios. Algunos lo lograron pero otros vieron sus terrazas volar por los aires.
Los árboles también por saltaron por los aires. El viento arrancó algunos de raíz.
Por las imágenes más parecía un huracán que una simple tormenta. Cayeron 24 litros por metro cuadrado en Ourense en apenas minutos. Ha habido mucha agua y mucho viento en muy poco tiempo, comentaba un bombero.
Por la noche, hacían el recuento de los daños. Tras un domingo de caos en la ciudad toca limpiar e intentar volver a la normalidad este lunes.