La soledad se ha ido convirtiendo poco a poco en una realidad cada vez más plausible en toda Europa. En algunos países, este fenómeno ha crecido de tal manera que incluso se ha empezado a abordar como una cuestión de estado. Es el caso de Reino Unido, donde al exPrimera Ministra, Theresa May, anunció en Twitter la creación de un Ministerio de Soledad, debido a que esta se había convertido en "una triste realidad de la vida moderna".
Además, según un informe publicado por el Instituto Internacional de Estudios Sobre la Familia, se trata de una realidad que diferencia claramente la soledad física de la psíquica, las cuales no guardan una relación de causa-efecto. De esta manera, según los datos de la BBC y Europa Press que recoge el estudio, pese a que los jóvenes son los menos propensos a vivir solos, al mismo tiempo son el grupo de edad, entre 16 y 24 años, que siente la soledad con más frecuencia, incluso más que las personas mayores.
Sin embargo, aunque no exista relación entre ambos conceptos, lo cierto es que la tendencia a vivir solo está a la alza en nuestro país. Según datos del INE, para 2030 habrá casi cinco millones y medio de hogares unipersonales en España, casi un millón más que actualmente, lo cual supondría un 28,6% del total.
De esta manera, en Reino Unido se creó el Ministerio de Soledad y se comenzó a abordar como una cuestión de Estado debido a que muchas personas morían sin que nadie advirtiera la pérdida. Así, eran los vecinos quienes avisaban a las autoridades por el hedor, enterándose posteriormente los familiares del fallecimiento.
Aunque en España no contemos con cifras oficiales ni este problema sea todavía tan acuciante como en otros países, lo cierto es que la tendencia es a la alza como en todo el continente.
Según datos del Eurostat, en 2017 el porcentaje de hogares unipersonales en España era bastante inferior al 30%, mientras que los países más afectados como Suecia, superaba el 50%.
Según este estudio, en el país escandinavo una de cada cuatro personas muere sola, habiendo descendido también casi a la mitad el número de asistentes a los funerales. Mientras, en otros países más cercanos como Francia aseguran que cinco millones de personas de más de 18 años, alrededor del 12% del total, viven sin tener ninguna relación familiar o social.
De esta manera, se revela como, pese a no ser todavía una realidad tan plausible en nuestro país, la soledad es una amenaza cada vez más presente en Europa y, por extensión, España.