El Ayuntamiento de Valencia ha instalado carteles en los accesos de la ciudad para dar la bienvenida a los conductores y avisarles de la prohibición de circular a más de 30 kilómetros por hora en todas las calles de un carril por sentido tal y como lo recoge la nueva ordenanza de movilidad.
Sin embargo, esta restricción de velocidad no ha sido lo que más ha llamado la atención de los ciudadanos. Los comentarios han ido dirigidos hacia el léxico utilizado en estos carteles. Con un diseño muy novedoso, en ellos se puede leer: "Benvingudes, València ciutat 30" cuya traducción al castellano es "Bienvenidas, Valencia ciudad 30".
Por primera vez, se utiliza el género femenino en una señal de tráfico para referirse al público en general. Una introducción del lenguaje inclusivo que ha tenido tantos detractores como partidarios.