Según la DGT, además del exceso de velocidad y el consumo de alcohol, las distracciones al volante, sobre todo por el uso del móvil, y no llevar el cinturón, son conductas directamente implicadas en la mayor parte de accidentes de tráfico. Cuestiones corroboradas por una encuesta de la OCU, en la que un 17% de la gente ha admitido usar WhatsApp en el coche.
Los conductores no son conscientes de los riesgos de usar el móvil al volante. Según una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 52% de conductores admite que supera los 110 km/h en carreteras secundarias (donde la velocidad máxima permitida es de 90 Km/h), un 43% de ellos reconoce que ha conducido habiendo bebido algo de alcohol; otro 12% señala que no se pone el cinturón en trayectos cortos y uno de cada cuatro indica que usa el móvil al volante, ya sea para realizar o responder una llamada (24%), escribir o leer un WhatsApp o manipular el navegador instalado en el teléfono (17%).
Entre los conductores encuestados, la multa más frecuente durante los últimos cinco años fue por exceso de velocidad, sancionada con 132 euros de media, seguida por las sanciones por mal aparcamiento. Sin embargo, las sanciones relacionadas con la ingesta de alcohol y el uso del móvil apenas suman el 2% del total de multas impuestas.
La OCU cree que las sanciones por usar el móvil o conducir bebido no están suficientemente castigado. La organización aboga, no por aumenta la multa económica, sino por retirar más puntos. Los usuarios también creen que estas conductas peligrosas al volante no se sancionan como debería.
La OCU apuesta por aumentar las medidas de control en las carreteras convencionales, donde se contabiliza un mayor número de fallecidos; equiparar la retirada de puntos entre las conductas más temerarias, es decir, que el uso del móvil al volante suponga la retirada de seis puntos del carné, tal y como sucede con las sanciones por alcoholemia o exceso de velocidad; y contar con recursos para incrementar las campañas de educación.