Samuel Kwesi, uno de los tres supervivientes del naufragado Villa de Pitanxo, que el lunes llegará a España junto a los otros dos marineros que pueden contar la tragedia, el patrón Juan Padín y su sobrino Eduardo Rial, suplica que se retome la búsqueda de los doce desaparecidos.
Es lo que ha contado a la prensa Julio Torres, pastor evangelista de Marín (Pontevedra) y amigo suyo, pues, tras haber establecido contacto, ha dicho Torres que Kwesi sería el primero en firmar la petición, ya sea a través de la plataforma change.org o presencialmente, como ha ocurrido el sábado en la Alameda de Marín que ha acogido una concentración pacífica para reclamar que se retome la búsqueda en aguas canadienses.
Torres ha señalado que si se vuelve a las tareas de localización y no se culminan con éxito, "todos seguiremos tristes, pero hay una cosa de la que estaremos orgullosos: que el país se movilizó".
El Villa de Pitanxo naufragó el martes en el Gran Banco de Terranova, a unos 460 kilómetros al este de San Juan, en Canadá. Tres personas sobrevivieron, nueve han fallecido y doce se encuentran desaparecidas.
El viernes llegaron en el buque 'Nexus' los dos primeros cuerpos de marineros fallecidos y el sábado lo hicieron los cuerpos de las otras siete víctimas, junto a los tres supervivientes, a bordo del pesquero español 'Playa Menduiña 2'.
El sábado, tras llegar a puerto a bordo de sendos barcos, concluyeron las identificaciones de las nueve víctimas mortales cuyos cuerpos han sido recuperados -cinco españoles, tres peruanos y un ghanés-.
El Gobierno de España ha fletado un A-400 del Ejército del Aire: cuatro españoles y uno de los marineros ghaneses de la tripulación del 'Villa de Pitanxo'.
El quinto español identificado es hispano-peruano, por lo que serárepatriado a Perú, como los otros tres marineros peruanos identificados.
El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación (MAUC), que trabaja en coordinación con los servicios del Gobierno de Terranova y Labrador para que la repatriación se realice con todas las garantías y lo antes posible, informa a las familias de los marineros en todo momento y mantiene activo un Plan de Asistencia Consular.