Solteros, pero mayoritariamente emparejados y sin hijos, más preocupados por cuestiones como la violencia de género, las desigualdades sociales que por la política y la economía, tolerantes con las nuevas formas de familia, a gusto con su situación de convivencia y razonablemente optimistas respecto al empleo. Son algunos de los rasgos que definen a la población española de 20 a 34 años (en torno a 6.438.000 en 2018), según la 'Encuesta Funcas a millennials' realizada por Funcas a una muestra de 3.000 internautas nacidos entre 1985 y 1999 y presentada hoy en Madrid.
El 68% de los encuestados trabaja (13% compatibiliza empleo y estudios). De ellos, ocho de cada diez (82%) declaran estar contentos con su trabajo, más por el entorno laboral (relaciones con los superiores y los compañeros) que por la remuneración, el interés de la ocupación o el horario. Por el contrario, apenas un 17% está descontento con su empleo, siendo la razón primordial que "cobro poco", por delante de otras causas, como el horario, el escaso interés del trabajo o el estrés.
Más de la mitad de los que no están trabajando, bien porque están desempleados, bien porque se dedican exclusivamente a estudiar, son bastante optimistas: en ambos casos, el 55% cree que va a encontrar un puesto de trabajo adecuado a su formación en los próximos seis meses (los parados) o en los seis meses posteriores a la finalización de sus estudios (los estudiantes).
Tener un buen trabajo es, precisamente, el objetivo al que un mayor volumen de millennials atribuye más importancia en este momento de su vida. Lo señala un 38% de los encuestados, una proporción que dobla a la de quienes mencionan "crear/ desarrollar mi propia familia" (18%). No obstante, en el grupo de 20 a 24 años, los objetivos de "tener un buen trabajo" y "estudiar/formarme" aparecen igualados en importancia (37% y 36%, respectivamente), mientras que en el grupo de 30 a 34 años se observa un equilibrio semejante entre los objetivos de "tener un buen trabajo" y "crear/desarrollar mi propia familia" (32% y 31%, respectivamente).
El 87% de los encuestados está soltero, aunque el 70% tiene pareja (la gran mayoría desde hace más de dos años). Solo el 11% tiene hijos: el 67% uno; el 28%, dos, y el 5%, tres, con una edad media de cuatro años. A más de la mitad de los que ya tienen hijos (56%) les gustaría tener más descendencia.
La disposición de recursos económicos y de tiempo es clave, según los millennials, para tener hijos. Disponer de unos ingresos regulares que "permitan vivir sin agobios" es la respuesta más mencionada (77%) a la hora de identificar las condiciones más importantes para tener hijos, seguida por el "empleo estable" (76%) y "tener tiempo para su cuidado y educación" (73%). En cambio, "tener pareja" (42%) o "estar casado" (8%) adquieren mucha menor importancia.
La tolerancia hacia las nuevas familias es otra seña de identidad de los millennials, en particular de las mujeres. Más de tres cuartas partes ven bien que una mujer tenga un hijo sin pareja (86% de las mujeres y 67% de los hombres) o que una pareja de gays o lesbianas adopte un hijo (87% de las mujeres y 70% de los hombres). A un 40% de los encuestados le parece bien que "la familia tradicional de padre y madre con hijos comunes haya perdido protagonismo en los últimos años", frente al 12% que lo considera negativo.
En materia de vivienda, apenas el 8% vive solo y otro 8% comparte piso con amigos o compañeros (co-living). Un 41% reside con su pareja (solos o con otros familiares). Del total de entrevistados que no viven solos (92%), nueve de cada diez se sienten a gusto con las personas con quienes conviven. Entre los que viven solos, solo el 13% no se siente a gusto, una mayoría porque preferiría vivir con su pareja.
El 35% vive de alquiler, aportando de media 335 euros mensuales para pagar el arrendamiento. Cerca de uno de cada cinco (18%) reside en viviendas de su propiedad, porcentaje que se eleva al 22% entre quienes trabajan y al 35% en el segmento de edad de 30 a 34 años. Un 46% vive en propiedades de sus padres u otros familiares. El 41% de los encuestados (porcentaje que sube hasta el 52% entre los que viven de alquiler) manifiesta intención de adquirir una casa en los próximos cinco años, pero el 59% no tiene planes de comprar (63% de los que están parados).
En cuanto a las noticias que más les interesan, medio ambiente y cultura acaparan la mayor parte de las respuestas, con el 82% y el 78%, respectivamente. Las mujeres declaran un especial interés por estos temas. En cambio, la política internacional y la economía suscitan mucho menos interés (37% y 40%, respectivamente), aunque algo más entre los hombres que entre las mujeres.
La sensibilidad de esta generación ante cuestiones sociales y medioambientales se refleja también en las respuestas a los temas que más les preocupan: la violencia contra las mujeres (92%), el cambio climático (91%) y las desigualdades sociales (91%) lideran el ranking de sus respuestas.
Preguntados por dónde se sitúan políticamente en una escala en la que 0 es el punto más a la izquierda y 10 el punto más a la derecha, el 40% se autoposiciona entre el 0 y el 3 (44% de las mujeres y 36% de los hombres) y el 15%, entre el 7 y el 10 (11% de las mujeres y 19% de los hombres). La media de todas las respuestas arroja 4 (3,5 entre las mujeres y 4,4 entre los hombres).
La mayoría concede mucha importancia al voto en las elecciones: en una escala en la que 0 es "nada importante" y 10 "muy importante", el 53% marca 9 o 10 en las elecciones generales y en las autonómicas, mientras que son menos (41%) los que atribuyen la misma importancia a las elecciones europeas. En los tres tipos de elecciones la proporción de mujeres que conceden máxima importancia al voto supera a la de los hombres.