Prisión provisional y sin fianza para la mujer detenida por cortar el pene a su jefe en San Andreu de la Barca, en Barcelona. Tras producirse los hechos, ella declaró que lo había hecho en defensa propia pero la investigación ha determinado que se lo inventó.
La magistrada no avala la versión que ofreció la mujer en un primer momento. La empleada declaró que había sido víctima de un presunto delito contra la libertad sexual, pero las pruebas recogidas en la investigación llevada a cabo por los Mossos d'Esquadra contradicen las declaraciones de la mujer.
Las cámaras de seguridad del bar no recogen la agresión que ella cuenta. Además, varios testigos aseguran además que no eran jefe y empleada. Tenían una relación sentimental y se presentaban como un matrimonio.
La jueza ahora ha decidido imputarla por un delito de lesiones graves con instrumento peligroso. Mientras el hombre, que no ha sido detenido, continúa recuperándose en el hospital tras una intervención quirúrgica de reconstrucción del pene.