Dos perros de la Guardia Civil especialistas en hallar restos humanos se han sumado hoy a la búsqueda de Clara, la niña de 10 años que se cayó desde un barco al pantano de San Juan hace ya tres días. Hoy un juez de guardia ha abierto diligencias tras recibir el atestado de la Guardia Civil. La menor estaba en una plataforma arrastrada por la embarcación junto a otros niños y sin chaleco salvavidas.
Los perros de la unidad canina de la Benemérita van subidos a lanchas mientras olfatean el agua para alertar si detectan la presencia de Clara. Son especialistas en dar con restos humanos.
Mientras los animales ayudan desde la superficie, los buzos siguen rastreando el fondo, ayudados con un sónar. Los expertos señalan que aunque este fondo, que está a unos 20 metros, no es muy complicado, el agua del pantano de San Juan es muy turbia a partir de medio metro.
El radio de búsqueda se ha ampliado debido a la presencia de corrientes que han podido desplazar el cuerpo después de tres días. También se ha reforzado el rastreo de la superficie ya que pasadas 48 horas los cuerpos pueden salir a flote.
Clara iba con otros niños y una tía, a la que la Guardia Civil ya tomó declaración, en una embarcación neumática. No saben si cayó al agua accidentalmente o se mareó y por eso terminó en el pantano. Algunas fuentes señalan que la menor iba en una plataforma de madera que arrastraba la embarcación junto con otros niños.
Lo cierto es que Clara, de 10 años, sabía nadar y no llevaba chaleco salvavidas, ni ningún otro tipo de arnés de seguridad.
Un juez de guardia de la localidad madrileña de Navalcarnero ha abierto diligencias tras recibir el atestado con las pesquisas de la Guardia Civil, al frente de la investigación desde un primer momento.
Los agentes que llevan la desaparición de la menor han interrogado ya a la tía de la niña, que llevaba la embarcación en el momento del accidente.