El Gobierno permite que los abuelos que convivan con menores de 14 años pueden ser los encargados de llevarles de paseo, pero "no es recomendable", según consta en la 'Guía de buenas prácticas en las salidas de la población infantil durante el estado de alarma', publicada por el Ministerio de Sanidad y la Vicepresidencia de Derechos Sociales y para la Agenda 2030.
El documento es un complemento a la orden de Sanidad publicada este sábado en el BOE en la que se establece que, desde este domingo 26 de abril, hasta 3 menores de 14 años puedan salir de paseo una vez al día durante una hora a un kilómetro de su casa, incluyendo espacios naturales y verdes, pero no parques infantiles ni instalaciones deportivas, evitando zonas concurridas.
Los menores deberán estar acompañados con un adulto con el que convivan, que puede ser un empleado de hogar, y que si no es el padre o tutor, deberá contar con una autorización de éstos. La Guía, que especifica que los paseos consisten en una "salida controlada y voluntaria", sí señala no se puede visitar a los abuelos que viven en otro domicilio, ni a familiares o amigos, aprovechando el paseo porque se trata de una salida que no permite el contacto ni la visita a terceros.
El Ejecutivo especifica que no se puede quedar con amigos, ni realizar actividades deportivas grupales y sólo ocasionalmente se podrá hablar con terceros, pero siempre manteniendo la distancia de aproximadamente dos metros, en una comunicación breve.
Por otro lado, aunque la prórroga del Estado de Alarma permite que los menores de 14 años acompañen a los adultos a realizar las tareas permitidas, como ir al supermercado o al banco, la guía recomienda que se prioricen en la medida de lo posible las salidas con los menores para que disfruten del aire libre.
Aunque no se permite coger el coche para realizar el paseo diario de una hora con menores, sí que recuerda que se podrá llevar a los niños/as en el coche en el caso de que tengan que acompañar a un adulto para realizar las tareas permitidas por el Estado de Alarma, o para acudir a la asistencia sanitaria.
Como ya se había precisado, los niños podrán correr, saltar, jugar y hacer ejercicio, siempre respetando las condiciones de distancia interpersonal con terceros, así como salir con sus propios juguetes, montar en patinete o en bicicleta. La persona adulta responsable deberá mantenerse a una distancia próxima de los menores y sus juguetes para poder tener control de la situación.
La guía recuerda que es responsabilidad de las personas adultas acompañantes el cumplimiento de las medidas de prevención durante estos paseos y recuerda que debe mantenerse una distancia interpersonal con terceros de aproximadamente 2 metros.
Sobre las medidas de protección, especifica que no es necesario el uso de guantes, porque lavarse de manos es más eficaz porque el uso correcto de guantes es más complicado para población infantil por lo que puede generar más riesgo.
Por ello, recomienda lavarse las manos antes de salir y al volver a casa. Asimismo, recomienda el higiene de manos (con agua y jabón o solución hidroalcohólica) cuando los menores tosan o estornuden, y también cuando toquen superficies que puedan estar contaminadas.
Del mismo modo, pide que se enseñe a la población infantil que no hay que tocarse los ojos, nariz y boca. Además, recomienda el uso de mascarilla en menores a partir de 3 años, con la supervisión de un adulto, en caso de acudir a lugares donde no es seguro poder mantener una distancia de aproximadamente dos metros entre las personas, siempre que se pueda asegurar un uso adecuado de la misma. En este caso, pide que no se tire la mascarilla al suelo y, si no es reutilizable, se deseche en casa.
La salida y entrada en los espacios comunes de la vivienda se debe realizar de manera respetuosa, siguiendo las medidas de prevención e higiene, facilitando la convivencia y tratando de no tocar en exceso las superficies comunes.
La Guía recuerda que se puede salir entre las 9:00 de la mañana y las 21:00 de la noche, para poder compatibilizar la salida con el horario laboral y las rutinas de cada familia, evitando así las aglomeraciones. Además, recomienda, en la medida de lo posible pasear en las horas de sol y evitar las salidas en las horas punta de entrada y salida de los centros de trabajo de la zona donde se vive.
En el documento, se sugiere preparar a los niños para que les haga ilusión el paseo pero sin falsas expectativas, despejando dudas o temores y explicando a los niños y niñas, de forma que lo entiendan, cuál es la situación y cuáles son las normas, en función de cada edad y circunstancias.
Para ello, propone practicar antes en casa todas las medidas preventivas a modo de juego, intentando que las normas siempre sean las mismas para que se conviertan en una nueva costumbre. Además, pide que se responda a las preguntas sobre el COVID-19 de manera sencilla y transmitiendo calma y sin trasladarle miedo, pero recordando también que el paseo es una posibilidad, no una obligación.
Por ello, señala que no hay que forzar el paseo si el niño tiene temor o no desea hacerlo, o se puede hacer más corto o interrumpirse. Durante el paseo, pide corregir "de manera afectuosa" los fallos. Asimismo, recuerda que las personas con capacidades físicas, sensoriales e intelectuales especiales pueden necesitar colaboración de todos para mantener la distancia física.
La guía señala realizar un paseo diario es beneficioso para la salud y el bienestar de la población infantil ya que puede mejorar su salud emocional, permite a los menores llevar una vida más activa físicamente y disfrutar del aire libre, y previene algunos de los problemas asociados al confinamiento, al tiempo que mejora el bienestar social y familiar.
A su vez, lo considera una "medida de equidad", ya que las condiciones de las viviendas y los estilos de vida no son iguales en todos los hogares. "El confinamiento supone un impacto desigual en la población infantil que vive en condiciones de vida de mayor vulnerabilidad", añade.