Los pasajeros de un vuelo de Turkish Airlines que viajaba desde Estambul hasta Sudán tuvieron que detener a un hombre que, después de haber estado gritando, intentando romper una máscara de oxígeno y una ventanilla, salió corriendo hacia la cabina de pilotos en pleno vuelo.
Según informa 'The Independent' a través del fotógrafo de Associated Press, Hussein Malla, el suceso tuvo lugar el viernes en el vuelo Boeing 737-900 con destino Jartum. Unos minutos después de haber despegado, el hombre comenzó a gritar, tras lo cual algunos pasajeros pasaron alrededor de quince minutos tratando de calmarlo.
El hombre se quejaba de que no podía respirar, a lo que los pilotos respondieron volviendo a Estambul para aterrizar de nuevo allí después de dos horas de vuelo.
Unos pocos minutos más tarde del anuncio, el hombre se levantó y avanzó rápidamente hacia la cabina, pero no pudo alcanzar su objetivo después de que otros pasajeros el redujeran y le inmovilizaran con restricciones de plástico provistas por la tripulación.
Este suceso alteró emocionalmente al vuelo, provocando gritos de terror y llantos de algunos niños. Finalmente, el avión volvió a aterrizar tres horas después de su despegue y la policía escoltó al pasajero fuera del avión. Al salir, se dio la mano con otros viajeros y besó a algunos niños.
Por el momento, la aerolínea no se ha pronunciado al respecto, ni se ha identificado al hombre en cuestión.