El Papa celebrará este año los festejos litúrgicos de Navidad de "forma privada", sin que esté prevista la presencia del cuerpo diplomático o alguna representación de las embajadas ante la Santa Sede debido a las disposiciones sanitarias por la pandemia del covid-19, según ha confirmado a Europa Press una fuente de la embajada de España ante la Santa Sede.
La Secretaria de Estado del Vaticano envió una carta el pasado 22 octubre a todas las sedes diplomáticas acreditadas ante la Santa Sede para informar de las nuevas disposiciones en un momento en que los contagios por coronavirus se han disparado en Italia y cuando han entrado en vigor más restricciones como el cierre total de teatros, cines y gimnasios, así como la clausura anticipada de los bares y restaurantes a las 18.00 horas.
La pandemia comprometerá también los actos previstos para el 8 de diciembre, día de la Inmaculada Concepción, en la plaza de España, donde se erige una estatua de la Virgen María en la que el Papa suele coronar con un ramo de flores.
En cuanto a las fechas navideñas, está previsto que el pontífice presida el sábado 24 de diciembre a las 21:30 horas la misa del Gallo en la Basílica de San Pedro. Al día siguiente, el día de Navidad, Francisco se asomará al balcón central de la basílica vaticana e impartirá a los 1.200 millones de católicos del mundo su bendición 'urbi et orbi'. En esta ocasión, se prevé que el Papa se dirija "a la ciudad y al mundo" y que reitere su petición para que se ponga fin a las situaciones de guerra e injusticias en todo el mundo.
El 31 de diciembre el Papa celebrará las vísperas y el Te Deum en acción de gracias por el año que termina y la primera celebración del 2021 tendrá lugar el mismo 1 de enero, Solemnidad de María Santísima, Madre de Dios, y 51 Jornada Mundial de la Paz, cuando Francisco celebrará una misa a las 10:00 horas en la basílica de San Pedro. Finalmente, el miércoles 6 de enero presidirá la eucaristía de la solemnidad de la Epifanía del Señor.
Por su parte, el Papa ha defendido una sociedad europea "sanamente laica" donde no se contrapongan las figuras políticas y religiosas, al tiempo que ha arremetido contra el laicismo que cierra las puertas a los demás y a Dios.
"Han terminado los tiempos de los confesionalismos, pero también el de un cierto laicismo que cierra las puertas a los demás y sobre todo a Dios porque es evidente que una cultura o un sistema político que no respete la apertura a la trascendencia, no respeta adecuadamente a la persona humana", ha destacado el Santo Padre en una carta.
La misiva se enmarca en el 40º aniversario de la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Unión Europea (COMECE), el 50º aniversario de las relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y la Unión Europea y el 50º aniversario de la presencia de la Santa Sede como Observador Permanente ante el Consejo de Europa.
En coincidencia con estos aniversarios, estaba programada, del 28 al 30 de octubre, una visita del cardenal Secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin a Bruselas, pero ha sido cancelada debido al empeoramiento de la emergencia sanitaria.
De esta manera, Francisco ha reclamado una Europa "sanamente laica, donde Dios y el César sean distintos, pero no contrapuestos". "Una tierra abierta a la trascendencia, donde el que es creyente sea libre de profesar públicamente la fe y de proponer el propio punto de vista en la sociedad", ha asegurado.