Tras las últimas reyertas de bandas juveniles en Madrid a machetazo limpuio que han provocado dos muertos, el ministerio del Interior ha decidido poner en marcha un plan para acabar con las bandas juveniles. Más de 500 policías se van a a desplegar desde hoy en Madrid
Patrullarán los 11 distritos más calientes de Madrid. Y ayer se produjeron 11 nuevas detenciones, tres de ellos acusados directamente de uno de los asesinatos del pasado fin de semana.
Todos, miembros de los grupos juveniles más violentos que se recuerdan. A mazazos es como entraban los agentes en varios domicilios de Toledo, Valladolid y Madrid con un saldo de once detenidos de la banda Dominical Don't `Play.
Así lo ha anunciado la delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Mercedes González, durante su visita a la Comisaría de Leganitos, y que tras la escalada de apuñalamientos de este pasado fin de semana que ha dejado dos muertos, a manos supuestamente de miembros de bandas juveniles en varias reyertas, ha informado de la activación de un nuevo 'Plan de Actuación contra las bandas juveniles', cuyo objetivo es "detectar e identificar a miembros de estas bandas violentas, evitar su proliferación y neutralizar la escalada delincuencial que estamos detectando desde finales del pasado año".
En concreto, el despliegue, que estará operativo desde este mismo jueves, tendrá lugar en los distritos madrileños de Carabanchel, Latina, Puente de Vallecas, Usera, Villaverde, Fuencarral, Centro, Arganzuela, Ciudad Lineal, San Blas y Hortaleza, además del municipio de Parla.
La violencia de las bandas juveniles provocó un enfrentamiento en la Comunidad de Madrid, entre Ayuso y Vox. La primera dejó claro que los miembros detenidos son menores de segunda generación que son tan españoles como Abascal, mientras que Monasterio acusaba al Gobierno regional de regalar la nacionalidad y le pedía cerrar los centros de menas. Ayuso señaló que los problemas con las drogas y la desestructuración familiar eran claves.