El psicólogo y director del Grupo de Investigación Ciberpsicología de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Joaquín Manuel González-Cabrera, ha aconsejado, ante la llegada de los Reyes Magos, no regalar un móvil antes de los 14 años, ya que no se trata de algo "inocuo", sino que se simultanean "luces y sombras".
González-Cabrera ha reclamado "cautela" a los abuelos, tíos o primos que "regalan tecnología" a las personas menores "sin consultar a sus padres". La llegada del teléfono móvil a casa "debería ser algo más que la compra de un regalo tecnológico, ya que lo ideal sería preparar toda una infraestructura familiar de parentalidad positiva y de cierto control, para que aterrizará con unas normas".
Y es que el psicólogo ha apuntado que es una tecnología que permite desarrollar "muchas esferas positivas" para la persona, de cara a mejorar su comunicación, aprender e incluso hacer fotografías y escuchar música, pero también es una puerta a muchos problemas como ciberacoso o sexting, sin olvidar que existe también "mucha dependencia".
En este punto, González-Cabrera ha recordado que, según datos recientes del Instituto Nacional de Estadística, más del 25% de los niños españoles tiene smartphone a los 10 años, el 75% a los 12 años y casi el 95% a los 15 años.
Ante ello, ha indicado que "no es un aparato cualquiera, ya que por su singularidad, es de todos los medios tecnológicos el que más puertas abre a la necesidad los padres estén supervisando su uso". De hecho, ha asegurado que esta supervisión puede venir "de reglar su uso más o menos", algo que puede hacer con "contratos de uso" como los que sugieren www.is4k.es o www.anar.org, entre otras posibles instituciones.
En este punto, ha puesto como ejemplo positivo, dentro de lo que "supone que un niño de 10 años tuviera ya móvil", que "una madre compartía con su hijo todas las cuentas de redes sociales, algo que puede ser una opción como estrategia de parentalidad". No obstante, ha apuntado que "a menores de 10 años cuánta menor tecnología tengan mejor; si ellos van a convivir con ello toda la vida!, así que hay que intentar que llegue cuánto más tarde mejor".
A partir de ahí, y con la recomendación de no regalarlo antes de los 14 años, ha apuntado que los padres "también conocen el grado de responsabilidad de sus hijos y cuándo pueden incorporarlo". En este punto, ha lamentado la "presión social" a la que se ven sometidos tanto padres como los propios menores, éstos últimos para "no sentirse aislados antes el grupo".
Para concluir, el director del Grupo de investigación Ciberpsicología de la UNIR, ha aconsejado el uso de programas de control parental, que puede ayudar a los padres "a darle al menor una visión del tiempo de uso que lleva y le queda; limitar el uso en tiempo; apagar o desconectar el wifi; o no poder activar o instalar una aplicación sin supervisión".