Tasha Frampton, de 36 años, ha perdido más de la mitad de su peso para poder cumplir su sueño: tener un bebé. Desde que se casó con su pareja, ambos habían deseado formar una familia pero tras varios años intentándolo acudieron al médico para saber por qué no lo lograban.
Según The Sun, los médicos le dijeron que podrían probar la fecundación in vitro, pero que para ello Tasha tendría que bajar drásticamente de peso, ya que si no no podrían realizarle el proceso para que funcionase.
A pesar de que en otras ocasiones había intentado hacer dietas, ya que había llegado a pesar más de 120 kilos, nunca le habían funcionado ni se las había tomado en serio. Pero al fijarse el objetivo de su embarazo y de poder formar una familia, la mujer logró la motivación necesaria y perdió más de la mitad de su peso.
Finalmente el pasado 2015 logró tener a su primera hija, Anabelle, y ahora está embarazada del segundo. Ha contado su experiencia y ha querido motivar a cualquiera que se proponga bajar peso, ya que como ella misma comprobó, se pueden lograr grandes cambios.