Del jazmín al heléboro: las mejores plantas de invierno para decorar un jardín
Existen especies de plantas perfectas para soportar las bajas temperaturas y la sombra
Muchas de ellas florecen en invierno y se han convertido en planta asociadas a la Navidad
Trepadoras como el jazmín o la hiedra funcionan bien durante todo el año, también en invierno
La llegada de las bajas temperaturas puede provocar que más de una de las plantas de tu terraza, balcón o jardín se eche a perder. Y es que no todas las especies son aptas para climas fríos y, por mucho que los meses primavera y verano hayan podido servirles para adaptarse a tu hogar, una caída en el termómetro puede echar por tierra todo este trabajo.
Por eso es importante que, al elegir tus plantas, tengas muy en cuenta la realidad del clima que te rodea. Otra opción es optar por plantas de interior y descargar los espacios exteriores. ¿Cuáles son las mejores plantas de invierno para decorar un jardín?
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Las plantas de exterior siempre se encuentran más expuestas a los factores climáticos: la lluvia, el sol directo, el viento, las temperaturas extremas... Es importante tener estos hechos en cuenta para identificar qué puede debilitarlas, así como modificar el riego, la situación, etc. de cada planta en función de las necesidades de cada momento.
Por ejemplo, las plantas necesitarán más riego en verano que en invierno, debido a las altas temperaturas. También puede ser necesario crear zonas de sombra para compensar las largas horas de exposición al sol en los meses de calor. Del mismo modo, en invierno conviene proteger a las plantas de exterior en caso de que las temperaturas desciendan más de lo normal. Puedes recurrir a telas anteladas, a invernaderos... Eso sí, lo mejor será asegurarte siempre de que las plantas que adquieras sean aptas para las condiciones climática de tu hogar.
Estas son algunas plantas de invierno que soportarán bien las bajas temperaturas:
- Jazmín (Jasminum officinale). Esta planta de olor irresistible es una de las opciones preferidas para decorar tus zonas exteriores sin riesgo de daños. Funcionan mejor a la sombra y son trepadoras, por lo que, con un poco de ayuda, podrán cubrir grandes superficies con sus hojas oscuras y sus flores blancas. Además, la Trachelospermum jasminoides es aún más resistente al frío.
- Hiedra (Hedera helix). La hiedra es otra de las traedoras más famosas que puedes encontrar en el mercado. Se trata de una planta muy agradecida que soporta muy bien las temperaturas del invierno y que puede crear verdaderos muros verdes si las dejas crecer y las guías adecuadamente. No necesitarán muchos cuidados.
- Crisantemo (Chrysanthemum). Es una de las plantas más recomendadas para los meses de invierno. Suelen florecer en otoño y su temperatura perfecta se encuentra entre los 10 y los 15ºC. Eso sí, en caso de helada, necesitarán protección extra. También debes evitar mucho sol directo, pero sí necesitan mucha luz natural.
- Acebo (Ilex aquifolium). Se trata de una planta decorativa y muy navideña, y no es casualidad que sea así: se da muy bien en climas fríos y con escasas horas de sol. Crece mucho mejor en suelo exterior, pero deberás evitar el sol directo. Si cuenta con sombra suficiente, podrá sopotar incluso las heladas.
- Col ornamental (Brassica Oleracea). Esta original planta es muy decorativa y resistente al frío. Destacan sus tonos morados, sosas y blancos con hojas rizadas, y funciona muy bien colocando varias juntas para que el efecto decorativo sea aun mayor.
- Violeta persa (Cyclamen). Esta planta con flor es apta para bajas temperaturas y necesita sombra para desarrollarse adecuadamente. Encontrarás distintas especies con flores de diferente tamaño y color: blanco, rojo, violeta, rosa... Florece durante el invierno, así que se aproximan meses perfectos para verlas crecer.
- Lavanda. Cualquiera de sus especies será perfecta para soportar el frío. Ten en cuenta que se adaptan a temperaturas de hasta -15ºC y que hacerte con una de ellas te permitirá disfrutar de su característico olor y de su color relajante. En realidad, se trata de una planta de climas cálidos que necesita mucha luz solar, pero aguanta muy bien las bajas temperaturas. Eso sí, cuando más bonita la verás será durante la primavera y el verano.
- Durillo o laurel salvaje (Viburnum tinus). Se trata de un arbusto de hojas muy verdes y pequeñas flores blancas que puede alcanzar una altura de 3 metros. Crece mejor si se planta en suelo y su dureza es más que probada: soporta, sin perder su color, el calor del verano y el frío del invierno, así como la sombra o el sol directo. Eso sí, su mejor época es el invierno, que es cuando florece.
- Heléboro (Helleborus). El heléboro o eléboro, también conocido como rosa de Navidad, soporta muy bien el frío y la sombra. Sus flores pueden ser blancas, amarillas, rosas... y su lugar óptimo debe proporcionarles luz natural (sobre todo para favorecer la floración), aunque no es imprescindible que sea así.
- Campanilla de invierno (Galanthus nivalis). Si tu jardín tiene zonas de frío y sombra, esta es otra de las especies perfectas para decorar este tipo de rincones. Crecen mejor en suelo y sus flores son muy características, con un tallo que se dobla y que mira hacia abajo. No llevan muy bien el calor, y su lugar óptimo tendrá sol intermitente y temperaturas, en general, bajas.