Desde Málaga a Cangas de Onís: un recorrido por los mejores Paradores de España
Lucía SicreMadrid
La red de Paradores de España ofrece alojamientos de lujo en lugares emblemáticos.Telecinco.es
La red de Paradores de España tiene carácter público y ofrece alojamientos de lujo en lugares emblemáticos
Los propios visitantes de estos establecimientos valoran su calidad y elaboran un ranking con los mejores espacios
El parador de Santo Estevo, en Orense, es el más valorado de todos: destaca su carácter histórico y su emplazamiento natural
Aunque existen alojamientos turísticos para todos los gustos, nada mejor que combinar un entorno natural o histórico privilegiado con un buen servicio para conseguir una apuesta ganadora y apetecible para casi cualquier visitante. Es el caso de la red de Paradores de Turismo: se trata de una cadena hotelera pública española que gestiona casi 100 hoteles en todo el país y una franquicia en Portugal. Todos y cada uno de ellos se encuentran en edificios emblemáticos o emplazamientos destacables, seleccionados por su interés histórico, artístico, natural o cultural. ¿Cuáles son los mejores Paradores de España?
Aunque hay muchos Paradores en nuestro país, no todos son valorados por igual por su público. Nadie mejor que sus propios visitantes para juzgar la calidad y el interés de sus instalaciones. Por eso la propia red ofrece información sobre este punto y selecciona periódicamente los mejores Paradores de España.
Parador de Santo Estevo. Con una puntuación de 9,8, lo usuarios de Paradores de España premian a este espacio ubicado en el Monasterio de Santo Estevo, en Orense. Se encuentra en un valle repleto de árboles y se trata de un edificio que data de los siglos VI y VII. De hecho, fue declarado Monumento Histórico Artístico 1923. Sus tres claustros, donde se puede apreciar la evolución del espacio, desde el románico al gótico y, posteriormente, al renacimiento, es una de sus grandes joyas.
Parador de Málaga Golf. En este caso, la historia queda en un segundo plano para dar paso al lujo. Este hotel, con una puntuación de 9,6 está situado junto al campo de golf y tiene vistas directas al mar mediterráneo, con acceso directo a una playa de arena blanca. También cuenta con una piscina recién remodelada y pista de tenis. El golf es su emblema y su gran atractivo: ofrece todo lo necesario par los amantes de este deporte.
Parador Costa da Morte. Este parador es el siguiente en la lista, con una puntuación media de 9,5. Se encuentra emplazado junto a la Praia de Lourido, en un edificio de nueva planta y arquitectura contemporánea que se desarrolla en varios niveles adaptados a la topografía de la ladera natural, con espectaculares vistas al mar. Lo rodean acantilados y playas, así como el Faro del Cabo Fisterra, bautizado por los romanos como 'el fin del mundo'.
Parador de Sigüenza. Este parador también es puntuado con un 9,5 y se encuentra ubicado en un castillo medieval del siglo XII, instalado en una alcazaba árabe. Se trata de una fortaleza con nueve siglos de historia, emplazada sobre un asentamiento romano, y fue residencia de obispos, cardenales y reyes. Su ambiente es emdiaeval y su mobiliario, castellano. Destaca también su capilla románica del siglo XIII.
Parador de Cangas de Onís. Nos movemos hasta Asturias para visitar un Parador que cuenta con idéntica puntuación al anterior, ubicado a orillas del río Sella y rodeado por Picos de Europa. El hotel es el antiguo Monasterio de San Pedro de Villanueva, un edificio con espectaculares estancias de piedra y madera, decoradas de forma elegante, cálida y tradicional. Es un punto de partida ideal para visitar el Parque Natural de Los Picos de Europa, el Santuario y los lagos de Covadonga, e incluso Llanes o Ribadesella.
Parador de Plasencia. Con idéntica puntuación (9,5), otro destino muy valorado por los turistas de Paradores es este alojamiento situado en el convento de Santo Domingo, que data del siglo XV. Este Parador se encuentra en una localización idónea en pleno casco histórico y es en sí mismo toda una joya arquitectónica. De hecho, fue sede de la primera escuela universitaria de la ciudad y exhibe restos de una antigua sinagoga.