Marisol Burón, madre de Marta Calvo, pide en el Congreso que sea delito ocultar un cadáver

  • Demanda que se tipifique como delito el hecho de ocultar de manera intencionado el paradero del cuerpo de la víctima tras cometer el crimen

  • El Congreso tiene 15 días para aceptar o rechazar la petición de Marisol Burón

  • Marta Calvo, de 25 años, desapareció el 7 de noviembre de 2019 en Manuel (Valencia)

Marisol Burón, madre de Marta Calvo, la joven supuestamente asesinada por un hombre en Valencia en noviembre de 2019, ha registrado este viernes en el Congreso de los Diputados una iniciativa legislativa popular cuyo objetivo es que se tipifique como delito autónomo la ocultación intencionada del cadáver tras un homicidio o asesinato.

Burón, en todo momento respaldada por el portavoz de la familia materna de Marta Calvo, Mariano Navarro, y el padre de la también desaparecida Marta del Castillo, Antonio del Castillo, ha reclamado a las puertas de la Cámara Baja que "a los asesinos no les puede seguir saliendo gratis callar".

La madre de Marta Calvo, visiblemente emocionada y sujetando una pancarta con el logo de la plataforma que lleva el nombre de su hija, ha explicado que perseguirá la instauración del ocultamiento intencionado del cadáver como delito penal "cueste lo que cueste".

"Si no hay cuerpo, hay menos delito. Los delincuentes tienen derecho a mentir y a callar. ¿Qué derechos tenemos las familias?", ha reivindicado Marisol Burón.

Tras el registro de esta iniciativa legislativa popular (ILP) en el Congreso, ha detallado que recibirán una respuesta en un plazo aproximado de quince días. En caso de ser positiva, la familia de Marta Calvo podrá comenzar una recogida de 500.000 firmas para continuar con el trámite de la propuesta en la Cámara Baja.

Marisol y sus acompañantes han recibido el apoyo de varios diputados de distintos partidos políticos, que han salido del hemiciclo para respaldar la iniciativa.

Antonio del Castillo, padre de Marta del Castillo, desaparecida hace casi trece años, ha denunciado que en España "ocultar un cadáver no tiene ninguna pena", por lo que los asesinos lo hacen "para eliminar pruebas".

Además, ha subrayado que desde la desaparición de su hija se han conocido “muchos casos” de ocultación del cadáver tras un asesinato. "Han tomado nota y no podemos consentir que siga así", ha añadido.

Por su parte, el portavoz de la familia materna de Marta Calvo, Mariano Navarro, ha remarcado que también cuentan con el apoyo de Juan Carlos Quer, padre de Diana Quer. "Este equipo de tres va a conseguir su objetivo", ha asegurado Navarro.

El asesino confeso no desvela dónde está el cadáver de Marta

La joven Marta Calvo desapareció en la localidad valenciana de Manuel en noviembre de 2019. Una vez detenido, su presunto asesino, Jorge Ignacio P. J, declaró que la chica falleció de forma accidental en un episodio de relaciones sexuales con cocaína y que posteriormente descuartizó el cuerpo. El acusado declaró que había repartido los restos del cadáver por diferentes contenedores.

Los agentes de policía han buscado el cuerpo de Marta Calvo por diferentes localizaciones como la cantera de Castelló, a unos tres kilómetros de Manuel; así como el paraje natural de Font Amarga en Manuel, la Ermita de Santa Ana en Llosa de Ranes y una zona rural en los alrededores de la localidad de Villanueva de Castellón, sin obtener resultados.

Los peritos de la acusación han definido a Jorge Ignacio P. J. como un "depredador letal", un "asesino en serie" o un "homicida sexual sádico". Según recoge el informe psicológico del acusado, el objetivo del acusado con sus encuentros sexuales era "la obtención total del dominio y el poder sobre la víctima" y finalmente "saber que él ha causado la muerte que se está desarrollando ante sus propios ojos".

En todos los casos el modus operandi de Jorge Ignacio P. J era el mismo: quedaba con chicas a través de una web de citas, especificando siempre realizar una "fiesta blanca" (sexo acompañado del consumo de cocaína). Aunque sus víctimas accediesen o no, el acudía a la cita con grandes dosis de esta droga, que luego introducía a traición en los genitales de la víctima. En el cuerpo de Lady Marcela, una de las víctimas mortales, había veinte veces la dosis letal máxima media de cocaína.

"No tener un lugar al que ir a rezar"

El pasado fin de semana, Marisol Burón se dirigió en una carta fechada el 30 de octubre de 2021 a los diputados y diputadas de la Cámara Baja pidiéndoles su "apoyo" en esta iniciativa.

"Me dirijo a Vds. para comunicarles que, como muchos sabrán, hace dos años, mi hija Marta, de 25 años, desapareció, me fue arrebatada, la arrancaron de mi lado sin piedad y nunca más la he vuelto a ver. Su asesino, me van a permitir que elimine el 'presunto', reconoció haberla descuartizado pero mintió sobre dónde estaba el cuerpo de Marta", explica en la misiva. Según señala, lleva dos años sin saber qué ocurrió con su hija, sin saber dónde está, sin poder empezar un duelo, "enloqueciendo por no tener un lugar al que ir a rezar y hablar" con ella.

Marisol Burón destaca la labor de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, encabezados por "la magnífica labor de la Guardia Civil", que "la siguen buscando sin descanso en vertederos, pozos y canteras", pero señala que su dolor es "inmenso".

"Hago esto por Marta y por todas y todos los que siguen sin aparecer porque sus asesinos mienten y de una forma despiadada nos martirizan. Pero sobre todo lo hago para intentar evitar que en el futuro pueda haber otra Marta más", subraya.