Una mujer dijo que había visto algo sospechoso en la carretera, un coche con el maletero abierto cerca de un pozo. Y no solo eso. Cerca de esa cartera el propio Jorge, principal sospechoso del asesinato de Marta Cavo dijo una frase: "Mira que lugar tan bueno para ocultar un cadáver". Son las razones por las que la Guardia Civil ha reactivado este martes la búsqueda del cuerpo sin vida de Marta Calvo por la zona de la localidad valenciana de Manuel, según fuentes de la Investigación. No es la primera vez que lo intentan sin éxito.

Un grupo de agentes de paisano ha comenzado a rastrear esta mañana la zona después de que una mujer acudiera a la Guardia Civil para alertar de que había visto a un sospechoso junto a un coche que estaba parado con el maletero abierto en la CV-562, una vía local que apenas tiene arcén.

Tras tomar declaración a la testigo, los investigadores que asumieron el caso han delimitado una nueva área de búsqueda donde hay un pozo que no está sellado, un invernadero, acequias con fango y varias casas en ruinas. La mujer asegura que vio al sospechoso varios días después del crimen cuando ella y su marido circulaban con su vehículo por la carretera CV-562 en dirección a Xàtiva.

La nueva zona de búsqueda se encuentra cerca del vertedero ilegal y la cantera que ya rastrearon medio centenar de agentes en septiembre en el paraje de Font Amarga en el término de Villanueva de Castellón. Sin embargo, el lugar que se inspecciona ahora está fuera del área delimitada por las ubicaciones del teléfono móvil de Jorge Ignacio P. J., el presunto asesino de Marta Calvo, Arliene Ramos y Lady Marcela.

La búsqueda del cuerpo de la joven, sobre quien su presunto asesino, Jorge Ignacio P.J., confesó haberla descuartizado tras una muerte accidental, se suspendió hace más de 15 días después de que los agentes centraran su trabajo en un vertedero ilegal próximo a Manuel.

En concreto, los agentes rastrearon la cantera de Castelló, a unos tres kilómetros de Manuel; así como el paraje natural de Font Amarga en Manuel, la Ermita de Santa Ana en Llosa de Ranes y una zona rural en los alrededores de la localidad de Villanueva de Castellón. Este lunes se ha reactivado la búsqueda con varios dispositivos desplegados por la zona de Manuel a la espera de poder encontrar el cuerpo de la joven, desaparecida hace más de dos años.

La joven desapareció en Manuel, donde residía su presunto asesino, en noviembre de 2019, tras haber mantenido un contacto sexual con él. Una vez detenido, Jorge Ignacio declaró que la chica falleció de forma accidental en un episodio de relaciones sexuales y cocaína y posteriormente descuartizó el cuerpo y distribuyó sus restos por contenedores.

El juez de Instrucción número 20 de Valencia ha citado a declarar a la madre de Jorge Ignacio P.J. el próximo 15 de octubre en calidad de testigo, después de que alguna de las acusaciones personadas en este procedimiento solicitaran al juez su testimonio ante las últimas contradicciones detectadas por los forenses.

La declaración de la madre de Jorge Ignacio P.J., había sido solicitada por Pilar Jové, la abogada que representa a la madre de Marta Calvo, a partir de la declaración de un amigo del detenido ante la Guardia Civil que afirmó que "si alguien sabe algo, evidentemente es la madre".

También la había pedido el abogado Juan Carlos Navarro, quien representa a varias mujeres que sobrevivieron a los encuentros sexuales con cocaína con el detenido, sobre la base de un informe psiquiátrico incorporado recientemente a la causa que indica que la madre no aprobaba su estilo de vida y que a su juicio evidencia un alto nivel de complicidad entre ambos.

El juez instructor había denegado esta petición anteriormente hasta en dos ocasiones y, según han explicado las defensas, la mujer podría optar por no declarar a pesar de haber sido citada, por tratarse el investigado de un familiar directo.

La madre del detenido residía en el momento de los hechos (y también en la actualidad) en Mallorca, aunque se tiene constancia de que estuvo el fin de semana posterior a la desaparición de Marta Calvo (desapareció el jueves 7 de noviembre tras mandar un mensaje con su ubicación, correspondiente a una vivienda de Manuel) con su hijo en Manuel, puesto que era el cumpleaños de este.

Vital para volver a intentar encontrar el cuerpo ha sido también la declaración de un amigo de Jorge Ignacio P.J., que en marzo del año pasado acudió al grupo de Homicidios de la Guardia Civil de Valencia para compartir con los agentes sus sospechas de que Jorge fuera el responsable del crimen. El testigo, según adelantó el diario “Levante-EMV”, "no podía quitarse lo de Marta de la cabeza", dijo que estaba convencido que la madre del principal sospechoso estaba al tanto de "de todo lo sucedido", tal y como le comentó el propio Jorge durante un recorrido en coche desde la casa del presunto asesino en l’Olleria a Gandía.