El equipo de expertos de la OMS que ha investigado en China el origen de la pandemia de covid-19 ha comenzado a abandonar el país. Tras 27 días en Wuhan (14 de ellos, de cuarentena) han concluido de forma preliminar que los orígenes del virus podrían encontrarse en un animal que ejerciera de huésped intermedio hasta los humanos o alojado en el embalaje de algún alimento congelado.
Los científicos ha denunciado haber trabajado en medio de una gran "presión política", algo que podría estar detrás de estas afirmaciones. También ha sorprendido otra de sus conclusiones al descartar el origen humano del virus.
Javier Durán Zamora es un investigador español que ha rastreado en cientos de fuentes oficiales e informaciones respuestas a los interrogantes que rodean el origen y propagación de esta pandemia. Como resultado de este intenso trabajo ha publicado con McGraw Hill y el Proyecto Clave de Aula Magna McGraw HillProyecto Clave de Aula Magna su libro 'Coronavirus con el sugerente subtítulo: 'Vincit Omnia Veritas'.
Según este experto, mucho antes de lo que han reconocido las autoridades chinas y con un origen diferente, el SARS-CoV-2 se hizo fuerte en este país y se propagó al resto del mundo a través del comercio y el turismo en aviones y pasando de persona a persona sin darnos cuenta.
Informativos Telecinco se ha puesto en contacto con él y le ha trasladado muchas de las dudas que hay aún alrededor de la pandemia y sobre las principales conclusiones aportadas por los expertos de la OMS que recientemente han estado en Wuhan, el epicentro de la pandemia.
Pregunta: Usted aborda en su libro muchas de las dudas surgidas en el mundo sobre el origen y explicación de la pandemia de covid19 ¿Cree que la misión de la OMS ha llegado tarde para poder saber la verdad de lo ocurrido?
Respuesta: Lo cierto es que dicha misión debió llegar antes. El momento correcto hubiese sido durante los primeros meses tras la comunicación de China a la Organización Mundial de la Salud de la existencia de este nuevo virus SARS-CoV-2 que, recordemos, se produjo el 31 de diciembre de 2019. Obviamente, por tanto, podríamos decir que ha llegado tarde, aunque a veces es mejor tarde que nunca como dice el refrán.
Es muy importante que este tipo de investigaciones se realicen en los primeros momentos tras la aparición de los primeros casos, ya que investigar todo lo referente al animal intermediario y a la cadena de transmisión del virus es de vital importancia para frenar los contagios.
Por supuesto que en este tiempo se habrán perdido algunas evidencias. No obstante, la ciencia tiene otros muchos medios para llegar a la verdad de lo ocurrido como pueden ser las entrevistas con las primeras personas afectadas y el personal médico que los atendió, los análisis de las muestras de sangre congeladas de pacientes en esos meses previos, o las muestras de aquellos pacientes que hubiesen padecido una neumonía bilateral en una fecha anterior a la oficial en la que fueron comunicados estos primeros casos. Posiblemente estaríamos hablando de un estudio que tendría que realizarse por todo el mundo, no sólo en China, siguiendo tan sólo criterios científicos y olvidando los intereses políticos. Algo que podría durar meses e incluso años en dar sus frutos.
Recordemos que en el caso del virus MERS-CoV aunque su descubrimiento en los primeros momentos provino de un paciente de Arabia Saudí en junio de 2012, los estudios posteriores lo consiguieron rastrear hasta un brote anterior inexplicado de neumonía, que se había dado concretamente en abril de 2012 en un hospital de Jordania, haciendo que incluso el país de origen fuese desechado. Esto podría haber sucedido también con el virus SARS-CoV-2 en China pero no lo sabremos hasta que la investigación de la OMS finalice.
P: Otra de las grandes incógnitas es si el virus fue liberado por un accidente en un laboratorio chino de virología. La OMS lo ha descartado y asegura que no volverá a trabajar con esa hipótesis ¿está usted de acuerdo con ello? ¿Se puede descartar la intervención humana en el origen de la pandemia?
R: La Organización Mundial de la Salud no ha enviado a investigar a Wuhan a un grupo cualquiera de personas sino a algunos de los más prestigiosos científicos de países como Estados Unidos, Gran Bretaña, Japón, Australia y Rusia entre otros. Son personas con un currículum excepcional que han dedicado toda su vida a la ciencia y que olvidando los intereses políticos siguen un método científico para llevar a cabo una investigación lo más seria y rigurosa posible. Para que este equipo de expertos haya llegado a esta conclusión, descartando tan tajantemente la intervención humana en el origen de la pandemia han debido de tener acceso a evidencias bien contrastadas y lo suficientemente concluyentes que no les hayan dejado lugar a dudas.
Tenemos que confiar más en la ciencia y en estas personas que han dedicado y dedican toda su vida a intentar salvar las vidas de los demás: médicos, enfermeros, virólogos, y científicos. Personas que, como sabemos, luchan en primera línea de batalla y a los que les estamos, a veces, fallando con estas ideas negacionistas. Entiendo que al escucharlas, estos profesionales sólo pueden sentir tristeza. Hemos de cambiar esto porque tenemos una deuda con ellos.
En mi libro he intentado hacer ver al lector a través del conocimiento cómo a lo largo de la historia el ser humano ya se ha enfrentado a estas epidemias y pandemias anteriormente. Nada de lo que está ocurriendo es nuevo y en todas las anteriores ocasiones estos virus han tenido un origen zoonótico. No obstante, también expongo que es cierto que en nuestra época ya contamos con la tecnología para crear algo así en un laboratorio (algo que como presento en el libro ya se hizo en 2015), pero estoy seguro en un porcentaje muy elevado de que en este caso al igual que en todos los anteriores, la vía de transmisión del virus a los seres humanos ha sido zoonótica.
P:También el inicio de los contagios en China es otra fuente de confusión. ¿Diciembre de 2019, otoño, o quizás durante los juegos militares meses antes? Usted que ha rastreado concienzudamente estas informaciones, ¿cuándo cree que tuvieron lugar los primeros contagios?
R: Estoy totalmente seguro, y pondría la mano en el fuego, al afirmar que los primeros contagios no tuvieron lugar ni en los meses de noviembre ni en diciembre de 2019 como se ha señalado hasta ahora, sino meses antes. Existen muchos datos que así lo corroboran, todos ellos los expongo en mi libro. Uno de ellos es la aparición de un paciente en el hospital Seine-Saint-Denis, en Francia que había dado positivo para Covid-19 el día 27 de diciembre de 2019, después de que el hospital decidiera volver a analizar todas las pruebas de todos los pacientes que tuvieron una neumonía desde el día 2 de diciembre de 2019.
Recordemos que, según datos oficiales de las autoridades francesas, se indicaba que los primeros casos en Francia habían tenido lugar a finales del mes de enero de 2020. Lo más extraño de todo, es que se realizó una amplia labor de investigación para conocer cómo se había contagiado esta persona, y este individuo no había realizado ningún viaje, de manera que tuvo que infectarse por otra persona en el mismo país.
Otros datos también nos muestran que el virus pudo estar circulando meses antes por el mundo. Por ejemplo, los análisis filogenéticos realizados por la Universidad de Edimburgo y otras universidades de Reino Unido y Francia, publicados en diversas revistas científicas de gran prestigio y que también indicaban que el virus podría llevar circulando por el mundo desde agosto a octubre de 2019, meses antes de lo que realmente se pensaba en un primer momento.
Además los análisis de aguas residuales en varias ciudades del mundo como Nieuwegein (Países Bajos), Milán y Turín (Italia), Santa Catalina (Brasil) e incluso la misma ciudad de Barcelona así lo corroboraron, algo expuesto más detalladamente en el libro.
También se presentan datos, testimonios y sucesos acontecidos durante los VII Juegos Militares Mundiales que tuvieron lugar en la ciudad china de Wuhan entre el 18 y el 27 de octubre de 2019 (meses antes de la aparición del nuevo virus).
Testimonios éstos, recogidos por distintos medios de comunicación internacionales en los que dichos militares hablaban de controles infrarrojos de temperatura corporal a la llegada al aeropuerto de Wuhan Tianhe, mascarillas en el welcome pack o pack de bienvenida que encontraron en los hoteles en los que se hospedaron, una ciudad vacía sin apenas habitantes (hecho que los sorprendió muchísimo) y compañeros que cayeron enfermos durante su estancia y no pudieron competir por ello.
También se presentan otros datos y acontecimientos como, por ejemplo, un simulacro que tuvo lugar el 18 de septiembre de 2019 en el aeropuerto Wuhan Tianhe (antes de los Juegos Militares Mundiales) y del que se hicieron eco algunos medios de comunicación de China. Éstos informaban que el Comité Ejecutivo de los Juegos Militares Conjuntos de Wuhan realizó un simulacro en el aeropuerto de Wuhan Tianhe llamado Seguridad Nacional y Salvaguardia del Transporte Militar, indicando que dicho simulacro simuló el proceso de eliminación de un nuevo tipo de infección por coronavirus.
En el libro se presentan éstos y otros datos bien sustentados por un total de más de 500 artículos científicos, periodísticos, libros, etc., en distintos idiomas que apoyan el hecho de que el virus podría haber estado circulando por el mundo mucho antes de lo que los datos iniciales indicaban, sin ser detectado debido al gran número de casos asintomáticos que generaba (81 %) y a que con el tiempo fue adquiriendo mutaciones adaptativas que aumentaron su morbilidad y mortalidad hasta finalmente ser detectado como la cepa L en Wuhan.
P: China siempre ha apuntado a que el SARS-CoV-2 llego al país desde el exterior, quizás en la superficie de productos congelados. Ya hemos visto que las autoridades chinas han detectado coronavirus en la superficie de productos importados de Brasil. ¿Cree que es posible que haya ocurrido así o es parte de la propaganda china?
Esta es una posibilidad que en la actualidad está siendo objeto de estudio pero no se deben descartar tampoco otras probabilidades que considero en mi libro más plausibles como, por ejemplo, la ruta de transmisión zoonótica.
Históricamente, y es algo que los lectores podrán leer en el libro, los seres humanos nos hemos enfrentado a estas epidemias y pandemias siendo la ruta de transmisión zoonótica la que, en todos los casos en el pasado, ha estado presente en el origen de estos virus. ¿Por qué tendría que ser ahora distinto? En el libro nos planteamos el interrogante de cuál podría ser el animal intermediario y partiendo de la hipótesis zoonótica apuntamos al pangolín, ya que era el señalado como uno de los animales intermediarios por algunos estudios publicados en prestigiosas revistas científicas que revelaron que algunos coronavirus de pangolín tenían grandes similitudes con el nuevo virus SARS-CoV-2 .
El pangolín es un animal protegido y en peligro de extinción cuyo comercio es ilegal en todo el mundo aunque hay mafias que trafican con él, ya que sus escamas son muy apreciadas por la medicina tradicional china. Nuestra investigación nos llevó a indagar en los países desde los cuales, y a través de estas mafias, salían las mayores exportaciones ilegales de pangolines hacía China.
La búsqueda en inglés no nos aportó ningún dato importante, así que decidimos realizarla en los idiomas estatales de cada país. A veces decimos, con toda razón, que si la noticia no se traduce al inglés no se da a conocer en el mundo. Fue entonces cuando descubrimos que en diarios locales y regionales de Malasia aparecían noticias que indicaban que el día 11 de junio de 2019 (meses antes de la comunicación oficial por parte del Gobierno de China sobre la existencia del nuevo virus SARS-CoV-2 a la Organización Mundial de la Salud) se habían producido una serie de extrañas muertes por neumonía entre los miembros de
Estos hechos habían tenido lugar en el Parque Nacional de Kuala Koh, en Kelantan, Malasia. Nos dimos cuenta entonces que este parque nacional era una de las reservas naturales y habitats de la especie Sunda Pangolin (Manis Javanica). A través de un artículo en la prensa británica supimos que gran parte del tráfico ilegal de pangolines que entraba en los mercados negros de China provenía de Malasia, tratándose de esta especie en concreto. Más tarde accedimos a un artículo científico en la revista Journal of wildlife and parks que nos indicaba que al ser el pangolín un animal muy apreciado por esta tribu Batek, existían leyes consuetudinarias que les permitían consumir su carne con fines de subsistencia.
Tras la aparición de esta enfermedad las autoridades aconsejaron, entre otras medidas, utilizar ropa protectora para poder acceder a la zona, geles hidroalcohólicos y mascarillas. Posteriores reportes en distintos medios de comunicación locales y regionales de Malasia, indicaron que la enfermedad se extendió rápidamente a las aldeas cercanas. El día 28 de junio de 2019, Datuk Seri (Ministro de Salud de Malasia) aconsejó al púbico que no fuera a la aldea de Orang Asli (cerca del Parque Nacional de Kuala Koh) porque, según palabras textuales: "La infección en los pulmones se propagaba fácilmente".
Un artículo posterior publicado en prensa el 6 de julio de 2019 abría con el siguiente titular: "Muertes en Kuala Koh, autopsias no concluyentes", e indicaba que las autopsias no pudieron confirmar las causas de las muertes y que las autoridades crearon un centro temporal de evacuación con 400 camas. Finalmente, las autoridades del país aseguraron que se había tratado de un brote de sarampión pero la Asociación de médicos Privados de Malasia indicó a través de la organización Code Blue lo siguiente: "Creemos que el sarampión fue una falsa pista que oscureció el análisis de las otras posibles causas de mortalidad. Se deben considerar otras causas de muerte". El lector podrá tener acceso a todos los detalles referentes a estos y otros tantos hechos en el libro junto a una amplia bibliografía al respecto.
Ante estos hechos, tanto la editorial McGraw-Hill - Aula Magna - Proyecto Clave como yo, nos vimos en la obligación moral de presentar estos datos ante la embajada de China en Madrid. Algo que la editorial se encargó de hacer, el día 13 de enero de 2021, a través de un escrito firmado por todas las partes y dirigido al embajador Wu Haitao, en dónde se detallaban todos los datos recogidos en la investigación que dio origen a este libro para que fueran comprobados si así lo estimaban oportuno.
A día de hoy, aún no hemos recibido ninguna respuesta por parte del Gobierno Chino. Aunque hemos de indicar que recientemente la Organización Mundial de la Salud ha indicado que el virus SARS-CoV-2 podría haber estado circulando por el mundo desde mucho antes de lo que pensábamos, algo que se plasmaba en nuestros estudios desde Agosto de 2020, bastantes meses antes y desde que el libro fue publicado el 20 de diciembre de 2020.
P: Europa tardó en protegerse de la pandemia lo que nos ha convertido en uno de las zonas más castigadas por la enfermedad ¿Es posible saber cómo llego a Europa y a España en concreto el virus?
R: Hoy en día contamos con los medios para realizar una amplia investigación que pueda discernir cómo y cuándo llegó el virus SARS-CoV-2 tanto a Europa como a España. Como ya he comentado anteriormente, existen bastantes medios para saberlo, desde análisis de muestras de pacientes que fallecieron por neumonía en los meses previos al primer caso oficial europeo o en nuestro país, hasta análisis de las muestras de aguas residuales congeladas de distintas ciudades como ya se hizo y expongo en el libro, o incluso a través de un estudio pormenorizado de los testimonios del personal médico o poblacional que pudo haber tratado o padecido un cuadro clínico similar al asociado al virus SARSCoV-2 en los meses previos tras la aparición del mismo.
Como ejemplo tenemos otro coronavirus, el virus MERSCoV. Aunque su descubrimiento en los primeros momentos provino de un paciente de Arabia Saudí en junio de 2012, los estudios posteriores lo consiguieron rastrear hasta un brote anterior inexplicado de neumonía, que se había dado concretamente en abril de 2012 en un hospital de Jordania. Todo ello fue posible gracias al estudio de muestras almacenadas de personas fallecidas en aquel país. Esto quiere decir que existe la posibilidad de que sepamos con futuras investigaciones cómo y cuándo llegó el virus a Europa y a nuestro país.
Probablemente el virus pudo llegar tanto a Europa como a España a través de diversas vías de expansión, tal y como expongo en mi libro. En un mundo cada vez más interconectado probablemente llegó a través del turismo (en los distintos medios de transporte) uno de los más eficaces en la propagación de este tipo de virus, como sabemos, es el avión.
Pero también pudo expandirse a través de los negocios. No olvidemos que China se ha convertido en una de las potencias en este ámbito y las reuniones entre directivos a nivel europeo son muy frecuentes.
Pero una tercera vía de expansión del virus que además se expone en el libro tiene que ver con los militares que participaron en los Juegos Militares Mundiales de Wuhan. Algunos de ellos enfermaron durante su estancia en la ciudad china y otros volvieron enfermos, tal y como recogen las entrevistas realizadas por distintos medios internacionales. Estos militares que partieron de España lo hicieron de las bases aéreas de Torrejón de Ardoz (Madrid) y de León.
A finales de mayo de 2020 el gobierno municipal del Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz (del PP) decidió realizar un estudio serológico (el primero a ese nivel en España) en el que participaron también los militares de dicha base militar que así lo solicitaron. En junio de 2020 salieron a la luz los resultados del estudio que indicaron que entre el 18 % y el 22 % de la población del municipio de Torrejón de Ardoz (Madrid) estaba infectada o se había infectado con el virus SARS-CoV-2 en un momento previo.
Sin embargo, otro estudio serológico realizado a nivel nacional y cuyos datos se conocieron el 4 de junio de 2020 revelaba que sólo un 5,2 % de los españoles tenían anticuerpos frente al virus SARS-CoV-2. ¿Qué había pasado entonces en Torrejón de Ardoz para superar por tanto a la media nacional?
P: Para concluir, ¿qué mensaje trasladaría a los lectores para animarles a leer su libro de investigación sobre la pandemia?
R: Con esta obra he tratado de trasladar un mensaje de esperanza y optimismo, huyendo del negacionismo y de los bulos que hoy en día, al igual que en siglos y años pasados, se suceden. Las personas que lean el libro podrán, a través del conocimiento científico, entender que el ser humano ya ha pasado por muchas epidemias y pandemias en el pasado y que todas ellas tuvieron un final. Aunque hoy, al vivirla en primera persona no lo veamos así, siempre ha existido ese final que en esta ocasión vendrá de la mano de esas maravillosa vacunas de ARN mensajero y que nos traerán un futuro brillante en el que enfermedades provocadas por virus como el VIH o el Ébola estarán mucho más cerca de desaparecer.
El lector podrá descubrir además que muchas de estos virus del pasado provocaban enfermedades que se cursaban con un cuadro clínico que, en muchos casos, era similar al que produce el actual virus SARS-CoV-2. Y también podrá acceder a un amplio estudio de investigación sobre los orígenes del virus desde una perspectiva histórico – social y seriamente sustentada en más de 500 artículos científicos, periodísticos y de toda índole que le atraparán desde la primera página.
Se trata de un libro que tranquiliza a la persona que lo lee y que ha sido escrito como un homenaje a todas aquellas personas (médicos, enfermeros, virólogos y demás científicos) que han dedicado sus vidas o las están dedicando para crear un mundo mejor y salvar vidas. A ellos les dedico el último apartado de mi libro llamado “El homenaje”.
Terminaré con una frase de Sun Tzu que en su libro El Arte de la Guerra decía lo siguiente: "Si conoces a tu enemigo y te conoces a ti mismo, en cien batallas nunca saldrás derrotado". Y recordad Vincit Omnia Veritas.