César A. O, acusado del asesinato de Ana Enjamio el 16 de diciembre de 2016 ha negado durante su declaración en la primera jornada del juicio que sea el autor del crimen y niega el hostigamiento a la víctima. La Físcalía pide 27 años de prisión para el acusado que, presuntamente, asestó 28 puñaladas a la joven.
En su declaración en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Pontevedra, el acusado asegura que el no cometió el crimen y que no sometió a Ana a ningún tipo de hostigamiento, como afirma la Fiscalía. César asegura que "mantenían una relación clandestina" desde diciembre de 2015.
En la noche de los hechos ambos coincidieron en la cena de Navidad de la empresa. Según el acusado en la cena de la empresa bailaron y se tuvieron "un escarceo" en el baño del local al que acudieron. Asegura que tras la cena caminaron hacia el centro pero que Ana se fue a casa porque le daba miedo que su novio le sorprendiera con él.
César afirma que tras la fiesta se fue a casa de sus padres, donde vivía entonces, y se dio una ducha porque no era capaz de dormir. Además, el acusado admite haber intentado suicidarse cortándose las venas tras conocer la muerte de Ana, de la que se enteró, según él, por sus compañeros.
El acusado ha reconocido que mantuvo relaciones sexuales con la víctima en el piso que esta compartía con su novio.
Para explicar la aparición de sangre en su coche, el acusado afirma que es porque mantenían relaciones sexuales cuando ella tenía la regla.
El relato que César ha hecho durante su declaración dista mucho del que confeccionó la Fiscalía. El ministerio público afirma que el acusado siguió a Ana tras la cena de la empresa y cuando ella entró en el portal la atacó sin piedad.
Antes de que comenzara la declaración del acusado, tanto la Fiscalía como la acusación popuar han insistido en que lo que se está juzgando "no es el comportamiento de la víctima, ni si tenía relaciones con uno, con otro o con varios".