La Guardia Civil ha vuelto a la casa de Jorge Palma, con él, el acusado del crimen de Marta Calvo. Creen que allí pudo matarla y descuartizarla. Por eso desmontarán desagües y tuberías en busca de rastros de sangre.
Un gran dispositivo policial ha acordonado la calle donde está la casa de Jorge Ignacio Palma en Manuel, Valencia. El detenido, en prisión provisional, ha llegado a su casa intentando esconder su rostro con la capucha del abrigo.
Según su versión, descuartizó a Marta Calvo en esa casa, aunque no la mató, se la encontró muerta tras una fiesta de sexo y drogas. Por eso los investigadores van a rastreen las inmediaciones con perros adiestrados en busca del cuerpo de la joven y van a desmontar tuberías y desagües. No se habían revisado hasta ahora porque no se sabía que Jorge Palma pudo descuartizar el cadáver de Marta y utilizar ácido, hasta que confesó.
Datos desconcertantesHoras antes de quedar con Marta, Jorge contactó con otra mujer que ya le conocía. Ella contó a la Guardia Civil que lo rechazó porque estaba muy nervioso.
Ni siquiera la muerte de Marta evitó que Jorge contactara con al menos tres mujeres más cuando ya se sabía buscado. Por esa obsesión del detenido, han incluido en la investigación la desaparición de Wafa la joven de 19 años en Carcaixent.