La Oficina del Parlamento Europeo en España ha lanzado un vídeo para conmemorar el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se celebra este 3 de diciembre, y poner rostro a las dificultades por las que están atravesando los más de 70 millones de personas con discapacidad que viven en la Unión Europea y sus familias por la COVID-19.
El vídeo, que cuenta con la colaboración del actor Jesús Vidal, cuenta la historia de Javi, un "espíritu indomable", en palabras del actor. "El ejemplo de superación, optimismo y actitud que todos necesitamos en un año tan complicado por la incidencia de la pandemia", ha indicado.
En el vídeo, de apenas un minuto, Amparo, la madre de Javi, narra cómo afronta su hijo el día a día con los problemas de la mascarilla, la distancia social y las conversaciones por videoconferencia, además del tumor maligno que ha superado en este año. "Con la incidencia del COVID-19, de repente le decimos no se toca, no se besa, no se abraza.... Lo pasan mal, mucho peor que nosotros", afirma su madre. Sin embargo, "no ha perdido la sonrisa en ningún momento; nos ha dado a todos una lección de vida increíble", recalca.
El impacto de la pandemia de coronavirus está siendo muy importante en Europa, especialmente para las personas con discapacidad. La Covid-19 ha afectado en mayor medida a estas personas, que han visto aumentada su vulnerabilidad y modificadas sus rutinas y actividades diarias, pero también para sus familiares, encargados de los cuidados, que en su mayoría son mujeres.
Por ello, el Parlamento Europeo se ha comprometido a elaborar una Estrategia Europea de Discapacidad post-2020 que sea "amplia, bien financiada y ambiciosa, y que refleje la diversidad de las personas con discapacidad y sus necesidades". Además, se pretende incorporar, por primera vez, una dimensión de género en esta estrategia que ayude a eliminar la discriminación contra las mujeres y niñas con discapacidad.
En esta nueva Estrategia de Discapacidad, el Parlamento Europeo quiere incidir en el acceso garantizado al empleo y la formación profesional para las personas con discapacidad que se enfrentan a unas tasas de empleabilidad del 50,6% frente al 74,8% de las personas sin discapacidad. Pero también el acceso a una educación inclusiva, a servicios de salud de calidad y accesibles, los servicios digitales o las actividades deportivas.