El incendio de Tarragona calcina viviendas y animales en las 6.000 hectáreas devoradas por el fuego

  • 50 dotaciones de bomberos trabajan sin descanso para controlarlo

  • Aún quedan focos calientes del incendio

Cinco días después de que el incendio se desatase en la Ribera del Ebro, en Tarragona, los bomberos conseguían cercar y asegurar el perímetro tras una nueva compleja jornada con conatos de nuevos fuego durante toda la tarde. La mayoría de los vecinos desalojados van a poder regresar hoy a sus casas. O a lo que queda de ellas. Porque muchos lo han perdido todo.

El dueño de una de las granjas más afectadas hoy ni siquiera podía atender a los medios. En su nave tenían 200 corderos, dos caballos y un burro. Dejó la puerta abierta para que escaparan, pero el fuego les cortó el paso. Han muerto todos. Y como él, son muchos los que han perdido sus coches, sus fincas, incluso sus viviendas.

Los bomberos han estado trabajando sin descanso. Pero la clave ha estado en esta noche. Los equipos de extinción han remojado las zonas afectadas y hoy ya pueden dar el incendio por estabilizado. Según el Subinspector de Bomberos, Josep Manel Escudero, no se pueden confiar porque aún quedan focos calientes y van a tener que seguir trabajando para su trabajo por finalizado.

Por su parte el Presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, ahora lo que toca “es ser muy consciente de cuáles han sido los daños, y por lo tanto tener una diagnosis muy bien hecha de cada uno de los municipios afectados y que, por parte de las administraciones sepamos coordinar también todas las líneas de esfuerzo”. Aún queda trabajo por hacer. Aunque si todo continúa según lo previsto, el incendio podría estar controlado esta tarde.