La pandemia de coronavirus ha restringido las visitas a los hospitales y en el Día del Padre, el madrileño Hospital 12 de Octubre ha abierto las puertas de sus UCI pediátricas a todos esos papás que lo están pasando mal al tener a sus pequeños ahí ingresados. Una jornada de que nos deja historias realmente conmovedoras.
Ser padre debería ser algo tan fácil como acompañar a un hijo en el momento más importante de nuestras vidas. "Estamos muy contentos de haber podido traer al mundo a nuestra hija. Toda una campeona, no llora casi nada, nos ha dormir muy bien", cuenta un hombre que acaba de ser padre desde el Hospital 12 de Octubre.
A veces todo viene de cara, pero en ocasiones, la cruz de la moneda se muestra desde las primeras horas. Hoy es un día especial, pero lo es más para un padre que tiene a su hijo recién nacido en la Unidad de Cuidados Intensivos.
"Tienes a tu hijo ingresado en el hospital y, bueno, lo pasas con ella, en este caso, en una situación diferente", relata uno de ellos.
Por ello, el Hospital 12 de Octubre abre las puertas de su UCI pediátrica para que todos los padres puedan asistir a sus hijos en este duro comienzo de sus vidas. Y ellos lo agradecen: "Te deja muy tranquilo el hecho de poder estar con él, poder ayudar al aseo del día a día del niño". Se sienten parte del equipo: "Podemos ayudar a los enfermeros, a los médicos y ser como uno más del equipo".
El Hospital 12 de Octubre cuenta con un área con habitaciones individuales. Se abrió en noviembre en plena pandemia para que, pese al coronavirus, en ningún momento el bebé se quede solo porque en este centro trabajan con la filosofía de que "los padres son imprescindibles y con esta filosofía de cuidado es con la que se trabaja en esta unidad".