Un joven austriaco de 29 años ha confesado ser el autor del asesinato de un hombre de 77 años al que escogió de forma aleatoria para ir a la cárcel porque no estaba contento con su vida.
Los agentes de policía de la localidad de Kufstein interrogaron al sospechoso después de que se presentara por voluntad propia en comisaría asegurando ser el autor del homicidio. Tras practicarle varias pruebas de alcohol y drogas, los investigadores concluyeron que el hombre era plenamente consciente y estaba lúcido en el momento de la matanza.
Desde hacía semanas, el joven planificó el macabro crimen con el sólo objetivo de ser condenado y así poder acabar en prisión. Para ello, asegura que escogió a una persona "mayor", un vecino de la ciudad al que consiguió llevar hasta una zona boscosa para a continuación terminar con su vida a puñaladas.
Fue el pasado lunes 14 de mayo cuando la policía encontró el cuerpo sin vida de un hombre de avanzada edad al que tardaron en identificar por no poder localizar ni a familiares ni a conocidos. Fuentes policiales aseguran que el asesino confeso planificó durante días el macabro crimen.
Tras su confesión, el sospechoso está un paso más cerca de conseguir su extraño objetivo de acabar en prisión tras haber ingresado en un centro de detención de Innsbruck, la capital de la región del Tirol..