El Gaokao, la selectividad en China, está considerado uno de los exámenes más exigentes del mundo por su alto nivel de estrés y competitividad. Millones de niños y adolescentes chinos se preparan durante años para un examen en el que se lo juegan todo.
En el país asiático, gran parte de la educación está enfocada a la realización de esta prueba que cada año da cita a algo más de 10 millones de estudiantes. Se calcula que los alumnos chinos dedican unas 12 horas de media al día a estudiar para superar esta estresante prueba.
La universidad en China está considerada una de las mejores vías para el ascenso social. Por eso, los que se presentan a este examen se lo toman como una verdadera batalla en la que sólo pueden quedar unos pocos. Durante la celebración del Gaokao es como si el país entero mantuviera la respiración: las obras se detienen, se modifica el transporte público y se extreman las medidas de seguridad.
A diferencia de la EVAU, la selectividad en China es un examen que se realiza a nivel nacional y no por regiones. En España, las preguntas varían en función de la Comunidad Autónoma así como la fechas de la realización de la prueba.
Por otra parte, la educación española sólo está enfocada a la selectividad durante el curso de 2º de bachillerato mientras que durante el resto de la etapa escolar, se persiguen otro tipo de objetivos y se tienen en cuenta otros vías de estudio alternativas a la universidad.
A diferencia del año pasado, cuando la prueba se tuvo que retrasar con motivo de la covid19, el Gaokao comienza hoy 7 junio en todo el país según lo previsto. Las autoridades han desplegado un amplio dispositivo de seguridad al que se ha sumado un estricto protocolo sanitario por el que los alumnos deberán someterse a una prueba diagnóstica antes de la prueba e incluso algunos examinadores deberán ser vacunados.
En las regiones con una tasa de incidencia más elevada, el Gobierno ha puesto a disposición de los estudiantes un servicio de taxis y autobuses para evitar el riesgo de aglomeraciones en los momentos previos y posteriores a la realización del examen.
Allí donde el riesgo de contagio sea menor, las autoridades permitirán que los alumnos se quiten la mascarilla una vez que hayan accedido al edificio en el que tiene lugar la prueba. En las horas finales antes de la realización del examen, los periódicos en China se llenan de imágenes de padres y amigos deseando suerte a los estudiantes.