Una mujer ha denunciado el protocolo médico que siguió el Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Ceuta con su hija, un bebé de apenas 2 meses y 25 días, la noche del jueves 1 de octubre. Explica que tras llevarla con fiebre y diarrea, la llevaron al pasillo, donde fue atendida por un médico que no consultó el historial clínico de la pequeña.
En la denuncia, que ha sido publicada por elpueblodeceuta.es, la madre explica que ya desde la sala de espera se incumplían las medidas de Sanidad: había un hombre tosiendo y dos mujeres con las mascarillas bajadas. Cuando la menor fue llamada para ser atendida, según el relato de la progenitora, la trasladaron a una cuna del pasillo, donde el médico ni la auscultó, ni consultó el historial clínico.
Tras él, llegaron las enfermeras, que colocaron el material médico en las sillas y sacaron sangre a la niña. Cuenta que mandaron hacer una PCR a la niña para lo que debían esperar seis horas al resultado en el centro. Se negó a ello: “No podía pasar tantas horas con mi hija en un pasillo, darle de comer y cambiarla allí, cuando ese pasillo es un foco de mayor contagio por donde pasan médicos, celadores y enfermeros”. Se marchó sin que el médico revisase al bebé y, el viernes le llegó el resultado negativo por coronavirus.
Por su parte, el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA)--una entidad dependiente del Ministerio de Sanidad de España que gestiona la prestación sanitaria pública de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla -- ha explicado al mismo medio que la bebé fue atendida “tal como marca la normativa del Ministerio de Sanidad para evitar contagios de Covid” y especifican que “tras ser valorada fue dada de alta a su domicilio”
Ante ello, la familia de la niña ya ha denunciado los hechos tanto al Hospital Universitario de Ceuta como a la Consejería de Sanidad de la Ciudad.